Tegucigalpa- El doctor Carlos Umaña alertó sobre la peligrosidad del fentanilo, un opioide sintético 100 veces más potente que la morfina y ampliamente utilizado en procedimientos quirúrgicos.
Según el especialista, esta droga constituye aproximadamente el 33% de los anestésicos empleados en la medicina y es fundamental en la inducción y eliminación del dolor durante las cirugías.
Lamentó que ya se esté consumiendo en Honduras “es grave que ya se esté consumiendo en nuestro país quiero aprovechar para decirle a la población que no se meta a consumir fentanilo porque en el momento que caiga la gente en Las garras de esta droga está sellando su destino”, mucha gente está muriendo en el mundo por el consumo de este opioide.
«El fentanilo es la droga que elimina el dolor al paciente cuando lo están operando. Es altamente peligrosa y, lamentablemente, ya se está consumiendo de forma recreativa en nuestro país, reiteró el galeno. Amaña.
El experto explicó que, aunque el fentanilo es insustituible en el ámbito quirúrgico debido a su bajo costo y alta eficacia, su consumo conlleva graves consecuencias. «Los opioides generan una euforia intensa, pero el fentanilo bloquea los receptores de la respiración, lo que puede causar una hipoxia severa y, eventualmente, la muerte», enfatizó.
El anestesista también expresó dudas sobre la efectividad de los planes de rehabilitación anunciados por las autoridades, ya que tratar la adicción al fentanilo requiere centros especializados, ubicados en zonas alejadas de la ciudad y con estricta vigilancia. «La rehabilitación es un proceso costoso y complicado. Si el gobierno ha detectado estos casos, debe invertir en infraestructura adecuada, pero no es algo sencillo», subrayó.
El fentanilo es una droga de rápida absorción, ya sea por vía oral, rectal, en parches o intravenosa, lo que lo hace aún más peligroso. «No podemos eliminar su uso en la medicina porque los sustitutos son hasta 100 veces más costosos, lo que haría inviable muchas cirugías en el país. Sin embargo, su uso por los adictos es lo que está causando tantas muertes en el mundo», explicó el especialista.
Finalmente, el doctor Umaña destacó que la adicción al fentanilo lleva a un aumento progresivo de la dosis, acercándose peligrosamente al umbral que bloquea los receptores respiratorios y provoca un paro. «Por eso hay tantas muertes: los adictos lo consumen sin supervisión médica, y en dosis muy cercanas a las letales», concluyó el médico.LB