spot_img

Disfrutemos la copa, escribamos orgullo con ‘H’

Por:

Compartir esta noticia:

Debo empezar por decir que la emoción que como aficionados al fútbol sentimos cada cuatro años -que es cuando se celebra una Copa Mundial- es incomparable y mucho más si nuestra representación nacional está entre las clasificadas a la gesta mundialista.
 

Que el Mundial de Brasil 2014, que ya comenzó, sirva para que el mundo sepa que al igual que esos héroes de pantaloncillos cortos, en esta tierra de Morazán hay gente digna, honesta, trabajadora y con deseos de mostrar lo mejor que como país tenemos.
He andado de arriba para abajo siguiéndole los pasos al equipo de todos. Me impresiona ver lo noble y creyentes que somos los hondureños cuando de apoyar a la Selección Nacional se trata. Tampoco importa el estatus social, la condición económica o la circunstancia migratoria, igual aupamos a morir a nuestros jugadores una vez que éstos se visten de ídolos nacionales.
A mis 37 años he logrado ver a mi selección en dos copas del mundo (Sudáfrica 2010 y ahora en Brasil 2014), porque debo decir que la majestuosa generación de 1982 no tuve la dicha de disfrutarla -apenas tenía 5 años-
Cuenta la leyenda que en el Mundial de España 82, un tal “Pecho de Águila” inmortalizó su nombre en la historia, al grado de ser catalogado aún por estos tiempos como prócer nacional. De esa misma generación de jugadores rechinan los apellidos de Arzú, Costly, Caballero, Laing, Maradiaga, Villegas, Yearwood, Toledo, Figueroa, Betancourt, Bueso, Drummond, Bulnes, Cruz, Norales y Güity.
Y no es que seamos mezquinos o que pretendamos vivir de los recuerdos, pero ha llegado el momento de seguir escribiendo la historia. Como aficionado al fútbol y como hincha del equipo 5 estrellas quiero que juguemos con orgullo y pasión. Que sumemos puntos y que al final de la jornada nos abracemos para reconocer que valió la pena el esfuerzo de los muchachos, o mejor dicho en otras palabras que saquemos a relucir esa trillada frase “de la garra catracha” para competir con cualquiera.
Nuestro Mundial es ahora porque estamos entre las mejores 32 selecciones del planeta. Que nadie nos quite la ilusión de soñar y pensar que sí podemos. Quiero pensar que los jugadores entienden el peso de esa ilusión y que harán todo por sostener nuestros sueños.
Que se venga Francia, Ecuador y Suiza, porque los vamos a enfrentar con seriedad y mucho respeto, pero sobre todo con responsabilidad.
En estos 31 días que durará la copa, dejemos de lado la mala leche, las malditas vibras y los pesimismos. Unámonos en el mismo sentimiento y tumbemos al gigante, como lo hicimos hace unos meses en el mítico Estadio Azteca. Ese día cantamos con lágrimas en el rostro el cielito lindo y querido, mientras la piel se enchinaba hasta más no poder.
Como aficionado al fútbol y como mochilero de la H en que me he convertido, lo único que puedo decir es que toca alegrarse con esta fiesta, somos parte de los protagonistas y a disfrutarla de principio a fin.
Cantinflas -que poco o nada sabía de fútbol- decía que hay mucho tiempo para llorar y que por lo tanto hay que saber aprovechar los pocos momentos que nos producen felicidad. Escribamos orgullo con H, aunque sepamos que es un error idiomático, más no lo es en lo futbolístico.


spot_img
spot_img

Lo + Nuevo

spot_img
spot_img
spot_img
spot_imgspot_img