Tegucigalpa- El director del Instituto Hondureño de Transporte Terrestre (IHTT), Rafael Barahona, lanzó una advertencia clara a los transportistas: si deciden paralizar los buses, el gobierno actuará con firmeza. Barahona negó categóricamente las afirmaciones de que los transportistas hablan en nombre de todo el sector, asegurando que solo representan a un pequeño grupo.
-A los transportistas que paralicen sus unidades se les quitará la concesión, advierte IHTT
Barahona dijo que hay que ponerle orden al transporte y algunos dirigentes voraces que existen en esta capital de Honduras, ya está el dinero, pero cuando hay agendas políticas no va a ajustar ni todo el Presupuesto de la República y ellos siempre van a encontrar una forma de querer desestabilizar el gobierno.
“Ellos piensan que pueden atravesar un bus y piensan que la población no va a actuar que los colectivos del Partido Libertad y Refundación no va a actuar, que la población no va a actuar y se va a quedar sometida ante las declaraciones irresponsables de tres o cuatro voceros del transporte público, eso no va a pasar los tiempos han cambiado la población necesita trabajar la población necesita estudiar ir a sus centros de salud y la población necesita que la economía siga adelante que dejen de molestar a la población que no se metan con el pueblo”
El funcionario también desmintió los rumores sobre una deuda de seis meses con los transportistas, señalando que, en realidad, solo se adeudan dos meses en algunas ciudades, y en otros cuatro meses. Además, reconoció que un grupo más reducido tiene pagos pendientes desde marzo, pero insistió en que no se debe mentir a la población.
Barahona reveló que el secretario de Finanzas ya ha destinado 224 millones de lempiras para comenzar a saldar la deuda, aunque se necesitarían 470 millones en total para cerrar el año.
Si los transportistas cumplen con paralizar sus unidades, ante esta situación, el IHTT ha diseñado un plan de contingencia que incluye la movilización de unos 200 buses grandes para mantener el servicio en los principales bulevares y el anillo periférico de la capital, anotó Barahona.
El director fue enfático al afirmar que el gobierno no permitirá que se chantajee a la población. Advirtió que cualquier unidad que se paralice no recibirá pago alguno y que, en caso de ser necesario, se cancelarán los contratos de concesión.
Además, Barahona señaló que, si los transportistas consideran que el servicio ya no es rentable, el gobierno está dispuesto a recuperar esas concesiones y otorgarlas a quienes estén dispuestos a trabajar y mejorar el servicio.
Finalmente, Barahona hizo un llamado a la calma, afirmando que ya están los recursos para cumplir con los compromisos, pero advirtió que no permitirá que agendas políticas desestabilicen al gobierno ni que afecten a la población, que necesita seguir con sus actividades diarias sin interrupciones.LB