– El empresario y periodista Ariel De Vicente revela las operaciones de una red de tráfico de influencias, compras amañadas, coimas, y actos irregulares en los que operan varios actores públicos coludidos con particulares.
De Vicente compareció en el canal 5 de la Corporación Televicentro y 30 de Televisión Universal, donde dijo tener pruebas sobre prácticas ilícitas en el manejo de empresas productivas bajo control del Estado, entre las que destacó al grupo camaronero conocido como Ibermar.
Las denuncias del propietario de un canal de televisión local ubicado en la sureña Choluteca y director del informativo de televisión Prensa Libre, señaló directamente al ministro de Finanzas, Héctor Guillén; al diputado sureño y vicepresidente del Congreso Nacional, Mauricio Oliva, a políticos de mayor rango, parientes de altos funcionarios, e hizo un mapa que registra un fuerte tejido de corrupción que tiene como centro de operaciones la región sur de Honduras.
De Vicente sostiene que el millón 150 mil lempiras que la policía incautó en posesión de la esposa del ex ministro de Finanzas, Héctor Guillén, provienen de un pago de tres millones de lempiras que el grupo que administra Ibermar realizó a funcionarios y políticos hondureños.
Según dijo la cantidad en poder de Dinora Aranburry de Guillén, es la coima que le correspondía a su esposo, que a su juicio forma parte de la red de beneficiarios de negocios impropios.
Ante las impactantes denuncias de corrupción formuladas por De Vicente se presentó al estudio de televisión del canal 5, el Comisionado Nacional de Derechos Humanos, Ramón Custodio, quien de inmediato ofreció protección al denunciante.
Igualmente, Custodio, llamó al Fiscal General de la Republica, Luis Rubí, ha tomar el caso e integrar al empresario de medios de comunicación al amparo de la Unidad de Testigos Protegidos.
A continuación Proceso Digital ofrece a sus lectores la parte medular de las denuncias realizadas por Ariel De Vicente:
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