Indicó que ahorita el fenómeno migratorio está en la ciudad de San Pedro Sula, donde se trabaja en conjunto con el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos y la fiscalía especial de la Niñez del Ministerio Público, ya que al gobierno le interesa ser un país altamente respetuoso de los estándares internacionales que protegen a la niñez y la adolescencia.
Indicó que se gestiona con los 298 alcaldes del país, el apoyo de sus municipalidades y en ese sentido, la Asociación de Municipios de Honduras (Amhon), juega un papel fundamental.
Agregó que se ha establecido comunicación con las asociaciones de municipios de Guatemala y El Salvador para que puedan articular esfuerzos y conocer, por ejemplo, cuáles son los municipios expulsores de los niños que tratan de migrar a Estados Unidos, acompañados y no acompañados.
Asimismo, cuáles son las posibilidades de reinserción social, laboral y comunitaria para que los menores regresen a Honduras y también las personas adultas también.
“Yo creo mucho en el tema de la descentralización; el gobierno central no lo puede hacer solo, es un trabajo que corresponde a un Estado por eso tenemos que coordinar un trabajo fuerte con las alcaldías municipalidades como lo estamos haciendo ya con las diferentes secretarías de Estado e instituciones de gobierno y por primera vez, un Estado articulado está respondiendo con la recepción de las personas adultas y los niños que están siendo retornados o deportados al país”, puntualizó Salas.