La detención ha sido fruto de un trabajo de colaboración con las autoridades policiales de Colombia y se produjo gracias a los datos disponibles en los ordenadores de Raúl Reyes, el «número dos» de las FARC que murió el pasado 1 de marzo en un ataque de las fuerzas aéreas colombianas en territorio de Ecuador.
Las fuentes señalaron que la detención de Rosario García Albert no tiene relación con una eventual colaboración que haya podido producirse entre las FARC y la organización terrorista ETA, que actúa en España desde hace cuatro décadas y que busca por las armas la independencia del País Vasco.
La Policía lleva a cabo un registro en el domicilio de la detenida en busca de documentación, en una operación que continúa abierta.
El fiscal jefe de la Audiencia Nacional, el tribunal español que juzga los delitos de terrorismo, viajó esta semana a Bogotá para tratar con las autoridades judiciales colombianas sobre la eventual relación entre ETA y las FARC.
Zaragoza recibió una serie de documentos que le fueron entregados por el fiscal general de Colombia, Mario Iguarán, a partir de la información hallada en los tres ordenadores de Raúl Reyes,
Iguarán afirmó que ambas organizaciones mantenían «un acuerdo terrorista» y que tenían la identificación de responsables del ingreso y circulación en España de dinero obtenido por la guerrilla en operaciones de narcotráfico.
«Esperamos prestar a las autoridades colombianas toda la ayuda que sea necesaria para llegar hasta las ultimas consecuencias, para evitar que sirva para financiar las actividades de esa organización terrorista», dijo por su parte Javier Zaragoza.
Iguarán compartió los documentos con el fiscal español en virtud de acuerdos de cooperación judicial entre los dos países.
