La vía estaría siendo utilizada como corredor para sacar ilegalmente grandes cantidades de productos maderables y drogas con destino a otros sectores del país y posiblemente Estados Unidos, según informó hoy la Fiscalía del Ambiente a Radio Cadena Voces que emite desde la capital.
La información se desprende de un informe confidencial que ya es del conocimiento de la Fiscalía del Medio Ambiente, la Corporación Hondureña de Desarrollo Forestal, Cohdefor y las mismas Fuerzas Armadas.
La Reserva de la Biosfera del Río Plátano fue declarada por la UNESCO como Patrimonio Mundial de la Humanidad en 1997.
En una investigación preliminar, la Fiscalía del Medio Ambiente confirmó que grupos aún no identificados abrieron la carretera, pero extrañamente cuando se apersonaron los fiscales y personal de Cohdefor a cotejar la apertura, la maquinaria que hacía los trabajos desapareció de la noche a la mañana.
La carretera está construida en la zona Sur de la Biosfera en la Boca de Sawason (Río Wampü) y que conecta a las comunidades Dulce Nombre de Culmi, vía La Llorona, desvió por Villa Linda, Cielo Azul y Sawacito y otras zonas hacia donde el tráfico de madera y el narcotráfico es el modus vivendi de muchos residentes de la zona.
Fiscalía confirma
Aldo Santos, fiscal del Ambiente, confirmó que un equipo del Ministerio Público de Catacamas, junto a empleados de la Corporación Hondureña de Desarrollo Forestal, (Cohdefor) fue desplazado a la zona para hacer las indagaciones del caso, pero no encontró información que le permita determinar quienes estarían atrás de la construcción de la carretera.
Expertos en el área de construcción explicaron que una carretera de esa extensión puede tener un costo no menor de 20 millones de lempiras, considerando que la industria local estipula un precio de dos millones por kilómetro trabajado.
Santos indicó que la carretera está construida dentro de la montaña y en medio de la foresta y se adentra dentro de la zona de amortiguamiento de la biosfera del Río Plátano, lo que puede poner en serio peligro el ecosistema del sector.
Indicó que la construcción de la carretera es muy alarmante porque llega muy cerca de la región de Mahor, donde se encuentra uno de los últimos bosques vírgenes de la zona, aún muy ricos en caoba y otras maderas preciosas.
También la carretera facilita la entrada a la región de Musing cerca de la zona núcleo. Según imágenes satelitales, es precisamente allí donde se percibe un avance de la frontera agrícola.
El alcalde de Dulce Nombre de Culmi, en Olancho, Roque Cruz López, aseguró no haber recibido ni autorizado ningún permiso de apertura de la carretera y no ocultó que la zona es propicia para el tráfico de madera y de otros ilícitos.
El edil se abstuvo de proporcionar más información a RCV, porque adujo que hasta hablar del tema es peligroso en la zona y se limitó a decir que desconoce la apertura de la vía, ya que se trata de una zona bastante inaccesible.
No saben nada en Soptravi
RCV buscó la versión de las autoridades de Soptravi, específicamente de la jefe de la unidad de Gestión Ambiental, Karla Lú Zelaya Ordóñez, para saber si habían tramitado el permiso de apertura de la carretera y señaló que desconocía esa situación.
Argumentó que la única manera de proporcionar información es que se le diera el número de expediente, aunque en la zona de Culmí, los proyectos son pocos, por lo que es fácil determinar, que compañìas trabajan en el área.
Sobre esta misma situación irregular, el comandante del comando de protección del bosque del Ejército, coronel de Infantería, Carlos Arístides Girón, dijo que solo cuenta con informes de la apertura de la carretera, pero que no les compete porque su papel es controlar el tráfico de madera.
No obstante, aseguró que se harán las investigaciones si la misma Fiscalía realiza las pesquisas del caso.
Ante lo delicado de las denuncias, el coronel Girón en un principio informó que se reunieron esta semana en las oficinas del Instituto Nacional Agrario con los ganaderos del sector y otros grupos, sin embargo, al salir de la cita, no quisieron pronunciarse del tema.
Varios de los consultados al cabo de esa reunión, se abstuvieron de referirse al tema y algunos se mostraron bastante nerviosos. Uno de ellos, que pidió que no lo citaran, dijo que si hablaban del tema sus vidas corrían peligro.
De las autoridades es conocido que la zona es una ruta tradicionalmente utilizada por traficantes de madera de color y otras especies de animales.
Por su conexión al Río Patuca, se puede utilizar esa ruta perfectamente también para el narcotráfico de drogas desde la Mosquitia.
Fuentes oficiales y del departamento de Olancho revelaron que se ha avanzado muy poco en la investigación porque se desconoce quien ordenó el permiso de apertura de la vía y si contó con el visto bueno de las autoridades de la Dirección General de Carreteras.
Gina Hernández, secretaria general del ministerio de Recursos Naturales y Ambiente (Serna) apuntó hoy que no se ha extendido ninguna licencia ambiental para abrir la carretera y anunció que se iniciará de inmediato una investigación de oficio en vista que se trata de una zona forestal protegida.
