– El ombudsman hondureño reiteró que es urgente discutir la renovación de la cúpula policial
Según el defensor de los Derechos Humanos, es importante evaluar la labor de la cúpula policial y quien no rinda en el combate de la delincuencia debe ser removido de su cargo.
Con policías corruptos no se combate inseguridad
Custodio expresó que con policías corruptos Honduras no va a tener la esperanza de poder revertir la situación de inseguridad en la que se encuentra.
Agregó que ni el aumento del número de policías, ni el millonario gasto en seguridad ha sido la solución, porque hasta ahora la delincuencia ha desbordado la capacidad preventiva o la represión policial del delito
Lo cierto es que vivimos una situación donde la verdad sale con partículas, pero quienes sabemos lo que ha pasado, es suficiente para estar alarmados y saber que hay un “estado de emergencia” en cuanto a inseguridad por las actuaciones indebidas de la policía, comentó.
Agregó que en materia de seguridad pública Honduras necesita una política clara del Poder Ejecutivo y determinar si “quiere o no quiere arreglar” esta situación de inseguridad.
Trabajo sin improvisar
Custodio admitió que dentro de la Policía hay gente buena, pero que para separarla de la gente mala debe hacerse un trabajo alejado de la improvisación.
El ombudsman hondureño reiteró que es urgente discutir la posibilidad de renovar la cúpula policial sin que el Estado se vuelva un ente enjuiciable por malos procedimientos como ocurrió en el reciente pasado.
El funcionario aseguró que en Honduras “están más garantizados los derechos de los criminales, delincuentes y del crimen organizado que de las personas honestas de este país.
Condena muerte violenta de periodista
EL titular del organismo humanitario condenó la muerte violenta del periodista Alfredo Villatoro y se solidarizó con su esposa, hijos y demás familiares.
“Nos solidarizamos con la familia del querido amigo Alfredo Villatoro y urgimos de las autoridades encargadas de la seguridad la pronta investigación hasta dar con el o los responsables materiales e intelectuales del crimen y que el mismo no quede impune”, dijo Custodio.
Añadió que el gobierno de Lobo debe adoptar las medidas cautelares necesarias para evitar la pérdida de más vidas de miembros del gremio de periodistas, que son víctimas de persecución y amenazas por la labor que realizan en pro de la libertad de prensa en el país.
“Condenamos las acciones de violencia contra los medios de comunicación, el asesinato de periodistas así como las amenazas y los ataques contra los comunicadores sociales ya sea provenientes de agentes del Estado como de particulares”, declaró.
Lamentó la actitud pasiva del gobierno ante tales acontecimientos que atentan contra el derecho a la vida, el derecho al trabajo, el derecho a la libre emisión del pensamiento y el derecho a buscar, diseminar e informar libremente por parte de los comunicadores sociales.
Amenaza grave a la prensa
Advirtió que la violencia contra periodistas y medios de comunicación continúa siendo una amenaza muy grave particularmente contra quienes cubren y denuncian problemas sociales, como el crimen organizado, el narcotráfico, violaciones a los derechos humanos y actos corrupción gubernamental.
Previo a la muerte violenta de los dos últimos comunicadores sociales, Custodio, auguró malos signos para la libertad de expresión frente al actor sin rostro que se llama crimen organizado.
Veo malos signos, advirtió Custodio, porque el periodismo investigativo es un periodismo de denuncia y el periodismo de denuncia pone en riesgo a quienes lo hacen. Agregó que parte de lo que se sabe del crimen organizado es porque los medios han accedido a publicar lo que se ha investigado.
De los 30 periodistas y personas vinculadas a los medios de comunicación, 9 perdieron la vida en el departamento de Francisco Morazán, 6 en Cortés, 4 en Atlántida, 2 en Copán, 2 en Olancho, 2 en El Paraíso, 1 en Santa Bárbara, 2 en Colón, 1 en Yoro y 1 en Lempira.