Al cierre de la sesión regular en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex) los contratos de Petróleo Intermedio de Texas (WTI) para entrega en julio restaban 2,36 dólares al precio anterior y finalizaban a 130,81 dólares el barril (159 litros).
Es la primera ocasión en cinco jornadas en que baja el valor de ese tipo de crudo, después de haber aumentado 6,88 dólares o un 5,5 por ciento en las tres primeras sesiones de la semana.
Los precios de los combustibles también se movieron hoy con más moderación que en jornadas anteriores, en las que la gasolina y el gasóleo se negociaron a precios históricos en el Nymex.
Los contratos de gasolina para entrega en junio finalizaron hoy a 3,3297 dólares el galón (3,7 litros), unos seis centavos por debajo del precio anterior.
Sin embargo, los contratos de gasóleo de calefacción para ese mes sumaron cinco centavos al valor del miércoles y quedaron a un precio récord de 3,9543 dólares/galón.
El gas natural para entrega en junio terminó la sesión a 11,69 dólares por mil pies cúbicos, después de sumar cinco centavos.
El encarecimiento del gas ocurrió a pesar incluso de conocerse que las existencias aumentaron la pasada semana en 85.000 millones de pies cúbicos, en línea con lo que preveían los expertos.
No obstante, el total de 1,61 billones es un 15,8 por ciento inferior al del pasado año, según cálculos difundidos hoy por el Departamento de Energía (DOE) de Estados Unidos.
Los operadores neoyorquinos decidieron hoy recoger beneficios después de la espectacular escalada del precio del crudo en los últimos días y a la vista del fortalecimiento del dólar frente al euro y otras divisas.
No obstante, se percibieron hoy renovados temores a que la producción a nivel mundial no sea suficiente en próximos años para atender la elevada demanda.
El diario The Wall Street Journal avanzó hoy que la Agencia Internacional de Energía (AIE) evalúa las condiciones de los yacimientos petrolíferos más importantes del mundo y que, a la vista de los datos, podría revisar a la baja de forma significativa sus previsiones sobre suministros de crudo, según el rotativo.
La AIE hasta ahora preveía que las reservas de petróleo crecerían de forma moderada y alcanzarían los 116 millones de barriles diarios hacia 2030, frente a los 87 millones de barriles actuales.
Sin embargo, la AIE se muestra preocupada por que el desgaste de los yacimientos y la falta de inversión pongan en apuros a las compañías para superar los 100 millones de barriles diarios en las próximas dos décadas, según el diario financiero.