Tegucigalpa – De acuerdo a la socióloga y rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, las constantes masacres y el déficit para investigar los crímenes hace que la percepción del hondureño no cambie en cuanto a la disminución de hechos violentos.
– Existe falta de investigación contundente, criticó Castellanos.
“Esto de los índices de violencia en el país es algo serio y persistente, no es fácil revertir cifras en un país que avanzó de una manera tan dramática hacia datos que superaron los 87 homicidios por cada 100 mil habitantes”, reflexionó.
Castellanos cuestionó la alta tasa de impunidad que campea en Honduras, lo que según ella se convierte “en un estímulo para las bandas criminales que actúan de manera cotidiana en diferentes puntos del país”.
Estimó que “un tema que abona mucho a la percepción de inseguridad y de crimen de las personas que no creen que han cambiado las cosas en el país, tiene que ver con las muertes violentas masivas (masacres) que se registran de manera frecuente”.
La rectora aseveró que “en las bandas de sicarios es donde se encuentra el punto más débil porque la medida impuesta que dos hombres no podrían circular más en un sola motocicleta tuvo su impacto inmediato, pero posteriormente estas bandas ahora usan varios vehículos para cometer sus crímenes”.
Reprochó que “la prueba científica y los cuerpos de investigación no tienen la fortaleza que se necesitan para combatir los crímenes. Además todo esto tiene que ver con la falta de confianza y seguridad de las personas que pueden aportar información, la gente sigue teniendo reserva y no confía en informar a la Policía.
Ejemplificó que esta semana fue ejecutada una joven que servía como testigo protegido en el caso del asesinato de la estudiante centralista Soad Nicolle Ham Bustillo. “Si los testigos protegidos se vuelven vulnerables cada vez más, esto no termina de construir confianza”, finalizó.
