Santiago de Chile- La Corte Suprema de Chile condenó hoy a penas de prisión a exagentes de la dictadura de Augusto Pinochet por el secuestro calificado (desaparición) de tres opositores al régimen y a cinco excarabineros por la desaparición de un cuarto disidente, médico de profesión.
En el primer caso, según informaron fuentes judiciales, la II Sala Penal del máximo tribunal chileno confirmó la condena de 20 años de prisión al brigadier Miguel Krasnoff y de 15 años al exsuboficial Basclay Zapata por la desaparición de Artemio Gutiérrez Ávila, Francisco Javier Fuentealba Fuentalba y Abundio Contreras González, perpetrada en julio de 1974 en Santiago.
Krassnoff y Zapata pertenecían a la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), la Policía secreta de Pinochet y están actualmente en prisión, tras ser condenados en decenas de casos de violaciones a los derechos humanos.
Artemio Gutiérrez Ávila, joyero de 23 años; Francisco Fuentealba, joyero y actor, de 26 y Abundio Contreras, un empleado de 28 años, pertenecían al Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), un grupo que combatió con las armas contra la dictadura y fueron detenidos por la DINA en distintos puntos de Santiago, según la investigación del juez especial Leopoldo Llanos.
Los tres fueron llevados a un recinto de torturas y exterminio situado en la calle Londres, en pleno centro de Santiago, donde fueron vistos por varios prisioneros supervivientes y donde se pierde su rastro.
En la parte civil, la Corte ratificó la sentencia que condenó al Estado de Chile a pagar una indemnización total de 250.000.000 millones de pesos (unos 367.000 dólares) a familiares de las víctimas.
En el segundo fallo, la II Sala de la Corte Suprema de Chile sentenció a cinco excarabineros por la desaparición del médico Arturo Hillrens Larrañaga, de 29 años, en la sureña ciudad de Temuco, a quien detuvieron en su domicilio el 15 de septiembre de 1973, cuatro días después del golpe que encabezó Pinochet.
El tribunal ratificó la sentencia de diez años de prisión a los exoficiales de Carabineros Francisco Ferrada González y Osvaldo Muñoz Mondaca, como autores del delito, y de tres años y un día a Eduardo Riquelme Rodríguez, Omar Burgos Dejean y Hugo Opazo Insunza como cómplices.
Al no acreditarse su participación fueron absueltos Gonzalo Arias González, Ernesto Garrido Bravo y Juan Aliro Verdugo Jara por falta de participación en los hechos.
Arturo Hillrens, también militante del MIR, fue detenido en su domicilio por una patrulla policial al mando de Osvaldo Muñoz Mondaca, quien, cuando el afectado pidió ver la orden de detención le apuntó con una metralleta y le dijo «Esta es mi orden», según testimoniaron los familiares del médico, testigos del arresto.
El facultativo fue llevado supuestamente a la segunda comisaría de Carabineros de Temuco, donde no quedó constancia de su ingreso ni rastro alguno de su estancia.
En la parte civil, el tribunal ratificó la sentencia que condenó al Estado de Chile a pagar 120 millones de pesos (unos 176.000 dólares) a los familiares de la víctima.
