Tegucigalpa – Los primeros rituales del velatorio del sacerdote jesuita José María Tojeira comenzaron la noche del martes en la parroquia Nuestra Señora del Carmen en Santa Tecla, La Libertad, en la vecina República de El Salvador.
El padre Tojeira estuvo en Honduras en la década de los 60 del siglo pasado y llegó a la zona de Sulaco y después El Progreso, Yoro, donde fue una voz destacada en la defensa de los derechos humanos y su cercanía con los campesinos.
Tojeira falleció el pasado 5 de septiembre en Guatemala y sus restos fueron trasladados a El Salvador, donde residió desde 1985, cuando fue trasladado a dicho país, todavía en plena guerra civil.
El padre “Chema” Tojeira, como era conocido popularmente en la feligresía y los círculos religiosos y laicos, le tocó vivir la muerte violenta de sus compañeros jesuitas Guadalupe Carney en Honduras, así como de varios religiosos y dos mujeres en la conocida como la “masacre de los jesuitas” en El Salvador, acción atribuida al ejército salvadoreño de la época.
Los restos del padre Tojeira serán enterrados en El Salvador, país que finalmente eligió para residir y quedarse para siempre en dicha tierra. (PD).