Dublín – El rey Carlos III aseguró este miércoles en Belfast que la sociedad tiene una «enorme deuda de gratitud» con la Policía de Irlanda del Norte (PSNI), al tiempo que reconoció los desafíos a los que se enfrenta en la provincia británica para acercar a las dos comunidades históricamente enfrentadas.
El monarca efectuó esas declaraciones al comienzo de una visita a la región, en la que está acompañado por la reina Camila para participar en varios actos relacionados con el turismo, las artes o el deporte.
«Vosotros sois la delgada línea que marca la diferencia para que tanta gente se sienta segura», destacó Carlos III en las instalaciones de Newforge de Belfast, donde radica la asociación deportiva de la PSNI.
Los reyes, que fueron recibidos por la ministra norirlandesa de Justicia, Naomi Long, y el superintendente policial, Jon Boutcher, presenciaron prácticas de diferentes deportes, como el rugby, el hockey o el fútbol gaélico, asociado este último a la comunidad católica-nacionalista de la provincia.
Hasta hace apenas 25 años, la federación de deportes gaélicos no admitía a miembros de las fuerzas de seguridad británicas, entre los que se incluían los de la antigua policía autónoma, el Royal Ulster Costanbulary (RUC), integrada casi exclusivamente por protestantes-unionistas y considerada por los nacionalistas como sectaria hasta reformarse en la PSNI en 1998, tras la firma de los acuerdos de paz.
«Solo quería que supieran que tenemos una enorme deuda de gratitud con ustedes, una deuda que realmente nunca podremos pagar. No doy por sentado todo lo que hacen, y mi admiración por ustedes es inmensa», declaró Carlos III en un discurso improvisado en Newforge.
En concreto, declaró su «gran admiración» por la manera en que los agentes de la PSNI afrontan «tantos desafíos diferentes», entre los que destacó sus esfuerzos para fortalecer el desarrollo comunitario.
«El hecho de que estéis preparados para hacer todo esto y que de alguna manera vuestras familias os entiendan y os den tanto apoyo es lo más destacable», agregó el rey. EFE