– Remarca la urgencia de contrarrestar la cultura de muerte y lamentó que en Honduras operen adolescentes sicarios
– El gobierno hondureño estima que en 2012 recaudará en impuestos a combustibles más de seis mil millones de lempiras.
El máximo prelado de la Iglesia Católica de Honduras reconoció que el alto costo de las gasolinas es producto de una crisis mundial pero indicó “deberíamos buscar otro tipo de soluciones tales como ahorrar energía y buscar como favorecer un poquito mas al consumidor, si es necesario, voy a entrar en un tema que conozco poco pero, sí es necesario, hay que reducir el ingreso que tiene el Estado por cada galón de gasolina”.
“Es un tema complicado porque los impuestos son la manera como el presupuesto de una nación puede dar el ancho y sí los impuestos se bajan no habrá fondos para hacer obras, pero, no digo quitar los impuestos pero si compartir un poco de austeridad con todos los consumidores, eso sí es posible” enfatizó.
El gobierno hondureño estima que en 2012 recaudará en impuestos a combustibles más de seis mil millones de lempiras.
Asimismo, habló de la situación económica hondureña luego de que en la administración del ex presidente Ricardo Maduro se logró condonar una sustancial parte de la misma. En el proceso para logra la condonación fue vital el papel del cardenal Rodríguez quien realizó gestiones en los más altos niveles internacionales.
El cardenal dijo que Honduras debería pedir una auditoria, ejecutada por notables nacionales, para conocer la verdad sobre donde fueron a parar los recursos que debieron destinarse para remediar la pobreza, producto de los intereses de la deuda condonada a la vez que lamentó que “no se usaron así”.
Recordó el llamado de Papa Benedicto XVI a la solidaridad, como único mecanismo para vencer el desastre económico mundial ante el fracaso de una economía especulativa y no de producción.
Asimismo, hizo un llamado a revertir la cultura de muerte que sigue cobrando vidas en Honduras, un país catalogado por las Naciones Unidas como el más violento del planeta.
Niños sicarios
El religioso lamentó que en Honduras haya adolescentes sicarios, un panorama que calificó como triste porque genera un dinero que se consigue matando.
Hizo un llamado a fomentar la paz y la solidaridad ante lo que llamo cultura de muerte.
Recordó como cada día se marchan jóvenes hondureños de su país debido a la falta de oportunidades e instó a las autoridades a crear espacios donde la juventud pueda aprovechar plataformas que le impulsen a una vida mejor.
En torno al proceso de depuración de la Policía dijo que los nombrados para integrar una comisión de Reforma a la Seguridad le merecen credibilidad e invocó porque se les apoye para realizar un buen trabajo.
A su juicio la mayor parte de los policías no están involucrados en el crimen pero dijo que la corrupción y la desatención es la que mina el comportamiento de miembros del órgano.
Honduras registra 46,450 muertes violentas en once años, una cifra que el cardenal lamentó y volvió a enfatizar a la paz y a la solidaridad como propuestas para enfrentar la crisis hondureña en todos sus órdenes.
