Tegucigalpa – Carlos Roberto Mejía López, emigró de Honduras hace 10 años y tras ser asaltado perdió todos los números telefónicos de su familia sin volver a saber de su madre.
No obstante, la visibilizarían mediática de la Caravana de Madres Centroamericana le permitió conocer que su progenitora le buscaba en México, específicamente en Guadalajara, y tras varias gestiones en las últimas horas pudo reencontrase con su madre Doris López.
En un emotivo momento madre e hijo se fundieron en un eterno abrazo y aunque el silencio se hizo presente las miradas y lágrimas sobraron.
Este es el tercer reencuentro que se produce durante la XIII edición de la Caravana de Madres Centroamericanas que inició el 1 de diciembre y culminará el 19.
El primer rencuentro fue protagonizado por una familia guatemalteca, los dos siguientes por familias hondureñas.
Cuando Carlos intentó pasar la frontera a Estados Unidos lo asaltaron y perdió los números para llamar a su familia que vive en extrema pobreza en Honduras, en tanto Carlos se quedó a radicar en García, Nuevo León.
Esta es una historia que se repite casi a diario ya que los migrantes son asaltados y desterrados de sus pertenencias y con ello de los vínculos familiares.
Con un ramo de flores en las manos y con los aplausos del resto de las madres el hondureño pudo volver a abrazar a su madre.
No obstante, su instancia en Guadalajara será corta ya la madre hondureña debe viajar el próximo lunes 18 de regreso a su país.
De acuerdo a organizadores de la Caravana se tiene programado un reencuentro más u el mismo corresponde a otra familia hondureña.
El resto de madres busca reunir pistas que les lleve a conocer el paradero de sus hijos.
Durante las 12 caravanas anteriores se han ha logrado 279 encuentros de hijos migrantes desaparecidos con sus familiares, así como resolver dos casos de hijos fallecidos; al menos es una respuesta a la incertidumbre en la que vivían.
Organismos no gubernamentales documentan al menos 580 casos de hondureños desaparecidos durante la travesía.
