San Salvador.– El candidato del oficialismo salvadoreño, Hugo Martínez, reiteró hoy un llamado a sus adversarios a debatir previo a las elecciones presidenciales del 3 de febrero para que los votantes conozcan «si se habla con la verdad o la mentira».
«Reitero mi llamado a todos los candidatos a debatir nuestras propuestas», porque «los salvadoreños tienen derecho a saber qué estamos pensando y qué estamos proponiendo los candidatos», publicó Martínez en sus redes sociales.
El candidato del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) señaló en un video que el debate «es un pilar fundamental de la democracia» y añadió que «si huimos y nos escondemos, jamás resolveremos nada».
El 19 de diciembre pasado, Martínez retó al contendiente de la derechista Gran Alianza por la Unidad Nacional (Gana), Nayib Bukele, a debatir tras la realización de un debate presidencial en la estatal Universidad de El Salvador (UES), en el que el candidato de Gana no participó.
Bukele publicó en sus redes sociales que no participaría en el debate por no tener «ni las mínimas garantías de imparcialidad» y acusó a la UES de negociar las condiciones del debate con el candidato de la también derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena), Carlos Calleja.
El exalcalde de San Salvador, expulsado en 2017 del FMLN y procesado por calumnia y violencia machista, se unió a Gana tras la cancelación de la formación de centro izquierda Cambio Democrático (CD) y el retraso en la inscripción de su movimiento Nuevas Ideas como partido.
Gana se ha caracterizado por apoyar el endurecimiento de la seguridad carcelaria, así como respaldar la pena de muerte, el paramilitarismo para combatir a las pandillas y oponerse a la despenalización del aborto.
El presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Julio Olivo, convocó en octubre de 2018 a más de 5,7 millones de electores a participar en los comicios, pero datos difundidos por el organismo en sus redes sociales señalan que están habilitados para votar más de 5,2 millones de salvadoreños.
«Se trata de la sexta elección presidencial desde la firma de los Acuerdos de Paz», que pusieron fin a 12 años de guerra civil (1980-1992), y en la que «participarán siete partidos políticos», señaló Olivo durante la convocatoria.
