Tegucigalpa – La presidenta de la Cámara de Comercio e Industrias de Intibucá, Jessica Zamora, manifestó este jueves que es imperativo reactivar la economía y volver a las actividades laborales en ese departamento del occidente del país ya que las pérdidas de los negocios y de puestos de trabajo son grandes.
“Realmente es imperativo integrarnos ya a las actividades laborales, evidentemente, siempre aplicando los protocolos de bioseguridad que corresponden a cada rubro”, manifestó la dirigente empresarial en declaraciones a la radioemisora HRN.
Estimó que las pérdidas en el departamento de Intibucá, son de alrededor de 60 por ciento en los rubros que están permitido que operen, los que apenas han logrado producir un 40 por ciento.
Añadió que eso significa que el 50 por ciento de los empleados no están trabajando y hay serias reservas de que esos empleos puedan ser recuperados una vez que se reintegren a las actividades laborales.
Apuntó que en Intibucá se implementó como una sugerencia de las alcaldías de Intibucá y de La Esperanza, una certificación en materia de bioseguridad y fue requisito para que las empresas que quisieran reintegrarse a lo laboral, tenían que obtener esa certificación para lo cual se impartió un curso por parte de la Región de Salud y por la Cámara de Comercio.
Estimó que en este momento hará falta, tal vez, un 20 por ciento de los diferentes rubros para poder ya tener certificados y estar completamente habilitados para operar.
Indicó que entre los rubros que en este momento es prioritario que reabran son las tiendas de auto repuestos y talleres de mecánica pues si la cadena agroalimentaria está trabajando, para poderlo hacer necesita repuestos y servicio de mecánica.
“Tenemos serias deficiencias en este momento con respecto a ese tema, queremos trabajar esto a través de salvoconductos, pero yo le puedo decir que tengo tres semanas de haber solicitado uno y hasta este momento no nos han dado respuesta, entonces, yo creo que es comprensible que podamos ya reintegrarnos de manera inteligente en ciertos rubros que tienen relación con los que ya están trabajando”, señaló Zamora.
Detalló que en este momento está permitido que operen bancos, supermercados, abarroterías, mercaditos, purificadoras de agua, ferreterías y las farmacias.
La arquitecta Zamora aclaró que ella no es propietaria ni se talleres de mecánica automotriz ni de casas de repuestos, pero considera que todo mundo para poder trabajar necesita vehículo tal es el caso de la cadena agroalimenticia.
Señaló que hay una preocupación porque no se puede desligar lo humano de la pandemia y se tienen dos problemas uno de salud y el otro es el hambre.
Aseguró que un porcentaje está sufriendo de hambre y prueba de ello es que a ella le ha tocado ver a hombres pedir comida y le han dicho que le regale comida ya hecha porque en su casa no tienen gas ni donde cocinar y tengo niños pequeños.
“No me regale algo para ir a hacer a mi casa, regáleme algo que ya esté hecho”, relata que le han dicho algunos hombres y “créame que ver esa cara de tristeza, de desolación, por eso debemos ya empezar con el trabajo en nuestro país”.
Comentó que la mascarilla se va a convertir en un nuevo accesorio que habrá que portar.