Detalló que más de 100 mil familias en Honduras se dedican al cultivo del café y cerca de un millón de hondureños trabajan en el corte del aromático, por lo cual, cuando el café sube de precio se refleja en la económica hondureña, con incrementos en la demanda y venta de todos los productos.
Sin embargo cuando hay un problema en el comercio del grano, hay problema en casi todos los sectores del país.
Indicó que la mayor parte de los técnicos esperaban que el café mantuviera los precios altos y que subiera, no obstante existe crisis en Europa, igual que en Estados Unidos y Japón.
Según Rosenthal Oliva, la reducción de precios significa un descenso importante en el PIB así como en el ingreso de divisas al país.
Dio a conocer que en la última semana, el precio del café ha bajado 50 dólares y la estimación de exportación para el presente año es de 5.5 millones de quintales lo que significa que Honduras percibirá 25 millones menos de lo que se había estimado.