Washington.- El presidente saliente de EE.UU., George W. Bush, conmutó hoy en su último día de mandato las sentencias contra dos guardias fronterizos cuya condena por abrir fuego contra un narcotraficante mexicano suscitó un intenso debate sobre la inmigración ilegal.
Los agentes, Ignacio Ramos y José Compean, habían sido condenados a más de diez años de prisión tras el tiroteo, ocurrido en 2005.