Riad – Arabia Saudí registró hoy lunes 1,122 nuevos casos de COVID-19, el doble de lo que venía registrando diariamente hasta que el pasado viernes cambió el sistema de medición y empezó a hacer pruebas masivas de campo, elevando el número total de infectados hasta el momento a más 10,000.
El Ministerio de Salud saudí anunció hoy que hasta el momento se han registrado 10,484 casos positivos de COVID-19, mientras que el número de muertes es de 103, lo que convierte a Arabia Saudí en el país árabe con más contagios.
El reino ultraconservador, con una población de 34 millones de habitantes, ha registrado un aumento considerable de casos desde que el Gobierno anunció el pasado día 17 el inicio de «pruebas masivas».
Según el Ministerio de Salud, hasta ayer se realizaron más de 180,000 pruebas de laboratorio para registrar casos de coronavirus, al mismo tiempo que están llevando a cabo «actividades de vigilancia activa» a diario, dijo el departamento en Twitter, sin detallar en qué consisten.
«Estas medidas preventivas han demostrado ser muy efectivas», aseguró ayer el departamento de Salud.
El pasado día 7, el ministro de Salud saudí, Tawfiq al Rabiah, estimó que los casos de coronavirus podrían llegar hasta los 200.000 «en las próximas semanas» si no se seguían las recomendaciones del Gobierno en materia de prevención.
El ministro lamentó entonces que algunos ciudadanos no se han tomado en serio el riesgo que representa el COVID-19 y no han respetado las medidas preventivas.
Arabia Saudí cerró todos los centros educativos, los locales de ocio y limitó todos los eventos públicos o reuniones, además de prohibir los viajes internacionales y las peregrinaciones a las ciudades santas de La Meca y Medina, con lo que se pretende reducir en un 90 % el contacto entre personas, según Al Rabiah.
Ante la llegada del mes sagrado musulmán de Ramadán, este fin de semana el gran muftí del reino, Abdulaziz bin Abdulá bin Muhamed al Sheikh, anunció que los rezos durante el mes de ayuno deberán hacerse en casa, debido al coronavirus.