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AMDC decomisa monigotes hasta con balas en su interior

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Tegucigalpa – La quema de monigotes o “pichingos” de año viejo es una de las tradiciones muy arraigadas de la cultura de los hondureños que se resiste a morir, pese a la prohibición de la venta de pólvora en la ciudad.
 

– Porfirio Lobo, Juan Orlando Hernández, Héctor Guillén y los maestros son los preferidos por los capitalinos para retratar los “pichingos” de año viejo.

En diversos operativos, autoridades de la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC), han procedido al decomiso de unos 14 monigotes repletos de cohetes y artefactos explosivos, e incluso hasta con balas de armas de fuego.

El Juez de la Policía Municipal, Fredy Cassasola, lamentó que hay sitios donde los monigotes son cargados hasta con balas. “En la colonia La Era decomisamos un pichingo con balas calibre 9 milímetros, así como de 22. La gente tiene que entender que cuando estos agarran fuego salen disparadas y se pone en peligro la vida de las personas”, refirió el funcionario municipal.

Asimismo, citó que en el caso de la salida al Sur, específicamente en Germania, hay varios monigotes que no se han podido decomisar porque aún no tienen cohetes.

Cassasola mencionó que se ha logrado el decomiso de pólvora en sitios donde se ubican semáforos de la ciudad, situación que los mantiene preocupados ya que se expone a las personas que transitan por estos lugares.

El funcionario expresó que el señor presidente Porfirio Lobo sigue siendo el preferido de los capitalinos para retratar al monigote de fin de año. Sin embargo, en el sector de Germania se pudo apreciar pichingos basados en otros funcionarios como Juan Orlando Hernández, Héctor Guillén y hasta maestros en ataúd.

Los monigotes, llamados «años viejos», se queman a las 12 de la noche del 31 de diciembre, y con ello los hondureños incineran sus penas y alegrías del año que termina.

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