Tegucigalpa– El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) instó hoy a las autoridades hondureñas a garantizar los derechos de las personas LGBTIQ+, no solo como un compromiso internacional sino como un acto de justicia y humanidad.
El ente estatal cuestionó el contexto de impunidad, odio y discriminación contra las personas LGBTIQ+ que prevalece en el país, así como las deficiencias de las autoridades para prevenir, investigar y sancionar a las personas responsables de cometer crímenes contra esta población.
En el marco del Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia, que se conmemora el 17 de mayo de cada año, la titular del Conadeh, Blanca Izaguirre señaló que, pese a que el Estado tiene la obligación de protección en su condición de garante, en Honduras, las personas trans enfrentan enormes barreras para gozar de una vida plenamente libre.
Cuestionó que, durante años, las leyes y políticas públicas no han respondido a sus necesidades ni han garantizado su protección.
Recordó que, en el 2021, el Estado de Honduras fue sentenciado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CORTE IDH) por la muerte de Vicky Hernández, una mujer trans y defensora de derechos humanos, que fue cruelmente asesinada en un contexto de violencia, prejuicios y discriminación histórica contra las personas LGBTIQ+, la cual se sumó al catálogo de sentencias condenatorias contra el Estado de Honduras.
En dicha sentencia, se ordena al Estado de Honduras aplicar garantías de no repetición de los hechos, adoptando acciones tendientes a garantizar y proteger los derechos de las personas trans en el país.
El punto resolutivo 15, de la sentencia, expresamente manda al Estado a crear los procedimientos o mecanismos legales que permitan a las personas adecuar sus datos de identidad de género auto percibida en sus documentos de identificación y en los registros públicos del país. Medida que, hasta le fecha, no ha sido cumplida por el Estado, permitiendo la repetición crónica de los hechos.
La defensora de los derechos humanos mencionó, para el caso, que, en el 2024, se sometió a conocimiento de la Corte IDH el caso del transfemicidio de Leonela Zelaya, en el cual se señala que las autoridades siguen teniendo deficiencias para prevenir, investigar y sancionar esos casos.
La muerte de Vicky Hernández y de Leonela Zelaya, como la de otras personas trans, en Honduras, son un reflejo de la violencia estructural y cultural a la que se enfrentan en todos los niveles de la sociedad, acotó.
Esta Institución Nacional de Derechos Humanos ha sido clara y firme en reiterar que, garantizar los derechos de las personas trans no es solo un compromiso internacional del Estado, sino un acto de justicia y humanidad, dijo la defensora del pueblo.
“Insto al Estado de Honduras para priorizar las acciones tendientes al cumplimiento de esta sentencia como una oportunidad para cambiar la historia y generar verdadero impacto sobre la vida de las personas LGBTIQ+ en nuestro país”
Además, exhortó a los medios de comunicación a evitar la desinformación, la difusión de mensajes que promuevan el odio y la estigmatización y avanzar a la utilización de un lenguaje inclusivo y respetuoso.
Recientemente, a través de medios de comunicación y redes sociales, la labor defensorial del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos fue objeto de mensajes de desprestigio y apología del odio hacia la institución en contra de la población LGBTIQ+.
Finalmente exhortó a la sociedad en general a respetar la dignidad y libertad de las personas LGBTIQ+ las cuales son intrínsecas a todo ser humano por el simple hecho de serlo.
Alrededor de 565 muertes violentas de personas LGBTIQ+
En Honduras, las personas LGBTIQ+ son víctimas de estigma, discriminación y más de 500 perdieron la vida violentamente, la mayoría en circunstancias impunes.
Datos del Observatorio de Violencia Hacia las Personas LGBTI+ de Honduras KAI+ establecen que, entre el 2004 y el 2024, perdieron la vida 565 personas de la diversidad sexual, de las cuales, la mayor cantidad se reportó en el 2023, con 52 casos.
Entre las víctimas figuran hombres gais con 320 casos, 149 mujeres trans, a los que se suman mujeres lesbianas y hombres bisexuales.
El informe establece que, en el 2024, se registraron 47 casos de muertes violentas de personas LGBTIQ+, a nivel nacional, de los cuales 25 que representan el 53%, eran hombres gais.
Al menos, una veintena de municipios de 12 departamentos del país fueron escenario de la muerte violenta de personas LGBTIQ+, 14 en el Municipio del Distrito Central en Francisco Morazán, 6 en San Pedro Sula, Cortés, 3 en Comayagua, 2 en Juticalpa, Olancho y 2 en la Ceiba, Atlántida.
La violencia y la discriminación ejercida contra las personas LGTBIQ+ constituye una grave violación a los derechos humanos que requiere reconocimiento expreso y atención específica e inmediata del Estado y de la sociedad en general, concluyó el Conadeh. IR