Álvarez acudió a la colonia El Retiro donde las últimas lluvias provocaron la muerte de tres niños que fallecieron soterrados, para auxiliar a la familia, luego que una inmensa roca callera sobre su vivienda, en el sector de El Retiro, a inmediaciones de la colonia Venezuela.
Los muertos responden a los nombres de Alex Ronaldo Palacios Rodríguez de 5 años; José Roberto Palacios Rodríguez de 15 años e Idalia Rodríguez de seis años, de la misma manera resultaron gravemente heridos Oscar Isais Palacios de 13 meses y María Gómez de 19 años.
La capital hondureña experimenta fallas geológicas que se agudizan durante los meses de lluvias debido a la saturación de los suelos.
El alcalde, quien este sábado visitó varias zonas donde los habitantes son amenazados por la fragilidad de sus viviendas ante los fenómenos naturales, recordó que desde que asumió su puesto, hace cerca de cinco años, ha presentado reiteradamente el peligro mortal que afrontan los más pobres de Tegucigalpa y Comayagüela.
Recordó que la Alcaldía junto con cooperantes externos han podido enfrentar gran parte de las dificultades y diseñar programas preventivos y de alerta temprana que han posibilitado salvar muchas vidas.
Asimismo, expresó su preocupación de que la fragilidad del suelo capitalino y explicó que zonas como El Rincón ponen en evidencia la gravedad del problema ya que es un sector que nunca había presentado problemas de gravedad.
“Lo que sucedió en El Rincón, nunca antes había pasado, la familia doliente había vivido por 30 años y jamás esperaron que se desprendería una roca y que provocaría la pérdida de 3 seres inocentes, esto quiere decir que no estamos exentos en los lugares donde habitemos porque nunca haya pasado nada”, manifestó.
Por lo tanto el jefe edilicio recomendó a los capitalinos en general que inspeccionen las partes altas, que observen si no hay movimientos de tierra, rupturas de calles o hundimientos en las mismas.
Reiteró su llamado para que durante la temporada lluviosa las 50 mil familias que viven a orillas de ríos y quebradas o en zonas de deslizamientos o derrumbes estén alerta y de ser posible evacuen sus viviendas a fin de evitar perdidas humanas a causa de un deslizamiento o una inundación inesperada.
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