El inmigrante que se identificó como Antonio Quiroz, dijo a la emisora HRN que llegó el lunes por la noche a Tegucigalpa en un bus de la empresa de Transportes El Rey, pero a unos minutos de bajarse de la unidad fue abordado por un agente que le pidió su identificación y luego le exigió el dinero que portaba.
Quiroz dijo que le explicó al uniformado que venía deportado de Ciudad Juárez en México y que solo haría escala en Tegucigalpa esa noche, para luego viajar a su país por la aduana de Guasaule, pero esa versión no le bastó y el policía le exigió que le entregara los 100 dólares y 300 lempiras que andaba en su bolsa.
“Prácticamente me dejo en la calle y durmiendo en el hospital Escuela”, dijo el apesarado inmigrante, quien relató que tuvo que dormir en la intemperie y no había probado alimento en todo el día.
Quiroz identificó al agente solo por su apellido Canales y el número de placa 0203 y pidió a las autoridades hondureñas aplicarle un ejemplar castigo porque “no es digno de portar el uniforme de la policía hondureña”.
El humilde hombre dijo que es lamentable que personas que deben darles seguridad a los hondureños se dediquen a asaltar en vez de cumplir con su deber y lamentó que ha tenido que deambular por la ciudad buscando ayuda para regresar a su país porque no tienen ningún conocido en este país.