Tegucigalpa – El anuncio de un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por parte de Honduras, de cierta forma intranquiliza a los sectores involucrados que miran con cierto temor que el sacrificado sea de nuevo el pueblo hondureño, como lo aseguraron personeros del Gobierno al revelar que se contempla la posibilidad de incrementar los impuestos o en su defecto la tarifa de la energía eléctrica.
– Los beneficios serían enormes, ya que según el banquero Jaime Rosenthal reducirá los costos de los bonos soberanos y los empresarios tendrán acceso a créditos
Fuentes oficiales revelaron que el país espera firmar en octubre próximo un nuevo acuerdo económico con el FMI, mismo que incluiría ajustes de las tarifas de los servicios públicos y otras medidas fiscales que afectarán a los más pobres.
El ministro de Finanzas, Wilfredo Cerrato, y el presidente del Banco Central de Honduras, Marlon Tábora, aseguraron que en su reciente visita a Washington, en la que reunieron con personeros del FMI, se revisó el Artículo IV, respecto a las cifras macroeconómicas y medidas fiscales del país, que permitirá al finalizar el 2014 un crecimiento del tres por ciento en el Producto Interno Bruto (PIB).
El ex ministro de Finanzas, Hugo Noé Pino, destaca que en su comunicado el organismo financiero internacional destaca cuatro aspectos: el diagnóstico de la situación fiscal de 2013 que obliga a la reducción del gasto público, además las perspectivas económicas que no son nada favorables para el presente año.
Como tercer punto, las reformas tributarias que le generaron ingresos al país, aunque no fueron suficientes para disminuir el déficit, según el FMI. Y finalmente se habla de lograr bajar las pérdidas en la ENEE que genera el 30 por ciento del déficit fiscal del Gobierno y esta incluye un aumento a las tarifas de este servicio público.
Además se habla de una mayor flexibilización del tipo de cambio de la moneda.
Para Noé Pino, el mayor problema está en la reducción del gasto porque el Gobierno se muestra reacio a disminuir este renglón. Sin embargo, estimó que las negociaciones entre Honduras y el FMI se basarán en la política fiscal y monetaria.
Gobierno reconoce condiciones del FMI
Añadió que con la implementación de medidas fiscales destinadas a fortalecer las finanzas públicas, se reducirá el déficit del sector público consolidado en 2014.
“Aunque el Fondo Monetario se muestra satisfecho por las reformas tributarias hasta ahora realizadas, señala que no son suficientes. Esto implica que el próximo acuerdo con el FMI, de concretarse, incluirá si no más impuestos, ajustes a tarifas de servicios públicos y otras medidas que afectarán a la mayoría de la población”, reconoció Cerrato.
Rosenthal Oliva: El acuerdo en necesario, pero hay que negociarlo
Para el banquero Jaime Rosenthal Oliva, “Honduras necesita un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional porque somos un país muy pequeño y además se logrará mejorar la calificación de riesgo que en este momento tenemos”.
Remarcó que firmar un acuerdo representa al Gobierno “vender mejor sus bonos”, además el sector privado se beneficia porque las facilidades de crédito que se le otorgan a un país dependen en gran medida del sello de aprobación del organismo internacional.
Además, dijo que no firmar el acuerdo provoca que ni el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), ni el Banco Mundial (BM), le presten dinero a Honduras.
Criticó que la gran preocupación del FMI es resolver la dificultad del gobierno y no la de los hondureños. “El problema más grande es que no producimos, no exportamos y no hay dinero para invertirlo en generación eléctrica, producción de granos básicos y otros productos importantes. De nada sirve devaluar la moneda porque el país no tiene nada que exportar, tampoco sirve subir los impuestos porque la base tributaria es relativamente poca”, argumentó.
Rosenthal Oliva sugirió al Gobierno negociar con el FMI. “Necesitamos un acuerdo con el Fondo, pero la negociación tiene que ser para lo que le conviene a los hondureños porque básicamente no hay empleo, la pobreza se profundiza, la inflación aumenta, la moneda se devalúa y las tasas de los tributos son de las más altas de América Latina”, manifestó.
Enfatizó que “debe haber un análisis y una negociación correcta con el Fondo para poner a la orden de los sectores trabajadores, suficiente dinero para producir lo que el país necesita”.
Urge acelerar el rescate de la ENEE
El director de Planificación de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), Gerardo Salgado, reconoció que uno de los grandes problemas de la administración pública es provocado por el déficit que provocan las pérdidas de la estatal de energía.
“El déficit debe ser llenado de alguna forma y eso implica que esos recursos se destinan a actividades que no se complementan a toda la labor del Estado que busca reducir la pobreza, inseguridad y mejorar las atenciones de salud”, explicó.
Detalló que el proceso de rescate financiero de la ENEE tiene que ver con la reconversión de la matriz energética, al tiempo que agregó que “lo presupuestado para compra de energía este 2014 oscilan en montos superiores a los 19 mil millones de lempiras, eso indica que la mayor parte de los recursos de la empresa se destinan a esta práctica”.
La ENEE es considerada como la empresa estatal más grande de Honduras, un país que tiene una demanda de energía que supera los mil 300 megavatios, de los que al menos la mitad los compra a empresas térmicas de capital privado.
Gran parte del déficit es por el exagerado gasto del Gobierno
Flores es del criterio que aprobar un nuevo paquete de medidas fiscales o incrementar las tarifas de energía eléctrica lo único que producirá es “una convulsión social”.
“El pueblo ya no aguanta ni más cargas impositivas, ni incremento de las tarifas. Además la gente estaría dispuesta a pagar si tuviera un buen servicio, pero lo que nos brinda la Empresa Nacional de Energía es pésimo. Nadie pagará tarifas altas a sabiendas que tiene un mal servicio”, reiteró.
Flores aseveró que “el Gobierno sólo habla de las salidas más fáciles, pero habrá que ver cómo se comporta el gasto corriente a finales de este primer semestre del año. Muchas instituciones van a andar bastante apretadas con la ejecución presupuestaria porque no se ha hecho nada para disminuir el gasto”.
