Tegucigalpa – El dirigente del transporte urbano, Wilmer Cálix, criticó este viernes las contradicciones existentes para tramitar los permisos de conducir en Honduras.
Expuso que ellos como dueños de buses envían a sus conductores a tramitar licencias pesadas para evitar multas o hasta decomiso de unidades.
Comentó que cuando los conductores se disponen a realizar los exámenes prácticos con las unidades que conducen son rechazados ya que las unidades de transporte ejecutivo son consideradas transporte liviano por parte de las autoridades.
Sin embargo, sí aplican multas y hasta decomisos porque un conductor de una unidad de bus ejecutivo transita con un permiso de conducir liviano, reprochó el dirigente del transporte.
Recordó que como parte de una modernización se cambiaron los buses amarillos por buses ejecutivos.
Sin embargo, el cambio no estaba contemplado en la ley, se sigue trabajando con una ley obsoleta en la que se pide un permiso de conducir de transporte pesado a los conductores de buses, dijo.
No obstante, las propias autoridades consideran a los buses ejecutivos como un transporte liviano.
Es una gran contradicción de parte de las autoridades que incluso están decomisando unidades por este motivo cuando la ley dice que solo se debe aplicar una esquela por no portar el permiso de conducir adecuado, zanjó. (RO)
