Lusail (Catar) – Didier Deschamps, seleccionador de Francia, dijo este domingo, tras perder la final del Mundial 2022 contra Argentina en los penaltis, que, ni aunque hubiera ganado el torneo, habría desvelado su futuro en el equipo nacional, porque tiene pendiente una reunión con el presidente de la Federación Francesa de Fútbol.
«Incluso si el resultado hubiera sido otro no habría respondido a esa pregunta hoy. Estoy triste por los jugadores y por el cuerpo técnico. Me reuniré con el presidente a principios de año», explicó en rueda de prensa tras la derrota, en la que apuntó que su conjunto hizo «lo necesario para ganarse el derecho a soñar» el título, tras igualar un 2-0 y después un 3-2.
El técnico vascofrancés tiene contrato hasta finales de este año y el presidente de la Federación, Noel Le Graet, le ha pedido en varias ocasiones que continúe hasta la Eurocopa de 2024. Incluso el presidente del país, Emmanuel Macron, presente en Catar para presenciar la final, se lo pidió.
«Argentina tiene mucha calidad y ha puesto mucha agresividad sobre el campo. Lo esperábamos. No le quito mérito. Hemos vivido muchísimas emociones. Es algo cruel. Tocábamos el trofeo de cerca. No ha podido ser», valoró.
Deschamps indicó que la derrota «es más cruel» tras las dos remontadas que hizo Francia. «Hemos dado la vuelta a una situación muy comprometida. Estábamos peor que en otros partidos, pero hemos sabido darle la vuelta y hemos tenido una bola de Mundial en el último minuto. Si hubiéramos perdido 2 o 3 a 0 lo lamentaríamos menos», comentó.
Deschamps aseguró que la falta de experiencia de algunos de los internacionales franceses puede explicar el motivo de que Francia hiciera una mala primera mitad, pero aseguró que con esfuerzo el equipo «se ganó el derecho a soñar».
Aseguró que los cambios de Ousmane Dembelé y Olivier Giroud justo antes del descanso «no eran para culpavilizar a los jugadores, que han hecho mucho para llevar a Francia hasta la final», pero consideró que el equipo necesitaba «frescura» y no quiso esperar más.
Deschamps no quiso hablar del arbitraje, aunque dijo que fue mejorable y que «durante toda la competición no ha sido malo para Argentina».
«Con eso no quiero decir que les hayan favorecido, prefiero no hablar de os árbitros porque puede traer consecuencias. Me limito a felicitar a Argentina. Hemos perdido contra un rival que disputaba de verdad la final de un Mundial y nosotros no», señaló.
El seleccionador tuvo palabras de consuelo sobre todo para Kylian Mbappé, autor de un triplete que no sirvió para ganar la copa.
«Este es el Mundial de los récords, hubiera preferido que fuera otro final. Mbappé ha marcado el Mundial hasta el final, pero no ha podido ganarlo, lamento su tristeza como la del resto del equipo», indicó.
Destacó los buenos resultados de esta generación, que ha jugado tres finales, ha ganado un Mundial y la Liga de las Naciones y que auguran, dijo, un buen futuro para el fútbol francés. AG