Doha – Tras la victoria de Ecuador contra Catar en el duelo inaugural del Mundial de 2022 (0-2) la euforia ocultó una evidencia que el seleccionador, Gustavo Alfaro, puso de manifiesto tras el duelo: Ecuador debe mejorar la eficacia goleadora.
Los dos tantos conseguidos por el delantero Enner Valencia, que puso fin a una racha de sequía goleador que había puesto en cuestión su presencia en la Tri, no fueron suficientes para que el «profe» se sintiera satisfecho.
«Con esto no nos alcanza», aseguró en su discurso tras el partido, convencido de que Catar les dejó más oportunidades de las que tendrán en el futuro, frente a Holanda el próximo viernes y ante Senegal cuatro días más tarde.
Ecuador se entrenó este lunes lejos de las cámaras y sus componentes no comparecieron ante la prensa tras la victoria de anoche, pero según apuntó Alfaro la víspera empezaron a trabajar ya en el sector ofensivo.
La ausencia de gol viene siendo la cantinela de Ecuador en las últimas semanas, en contraste con la solidez defensiva, de la que el equipo puede sacar pecho desde que, gracias a ella, acabó cuarta en las eliminatorias sudamericanas.
Ecuador llegó a Catar con una racha de más de 500 minutos con su portería a cero, una serie a la que añadió otros 90. Ese sector no parece presentar problemas.
La gira de amistoso previa al Mundial, contra Nigeria, Cabo Verde, Arabia Saudí, Japón e Irak, se saldó con dos victorias y tres empates y solo dos goles a favor, pese a que la entidad de algunos de los rivales invitaba a marcadores más abultados.
Algo que llevó a Alfaro a centrar el trabajo en esa faceta del juego, sabedor de que, ante los mejores, el salto se hace sin red.
«Frente a Holanda tendremos dos ataques y hay que aprovecharlos. Si queremos tener pretensiones, en eso tenemos que mejorar mucho», aseguró el argentino.
LA CLAVE VALENCIA
Una faceta que pasa por recuperar a Valencia, el capitán del equipo y una de sus almas, que ha atravesado un periodo amargo, en el que se le negaba el gol, lo que le valió duras críticas y bromas en su país.
El futbolista del Fenerbahce mantuvo la mentalidad alta y con el regreso a la selección dejó una muestra de su calidad.
Desde 2019 solo había conseguido tres tantos con la selección, pero en cuanto aterrizó en el Mundial su punto de mira volvió a afinarse y en el inaugural consiguió su segundo doblete mundialista, lo que elevó a cinco su cuenta de goles en los cuatro partidos que ha disputado en esta competición.
«Que se haya reencontrado con el gol es importante. No entendí las críticas, a mí pónganmelo siempre en mi equipo», dijo Alfaro.
Ese instinto es el que necesita una Ecuador que no puede permitirse seguir esa sequía, algo que tiene bien asumido su técnico.
Los próximos días servirán para mejorar, antes de medirse a Países Bajos, un duelo clave si quieren lograr su objetivo de superar la fase de grupos e ingresar, por segunda vez en su historia, en octavos de final, 16 años después de haberlo hecho en Alemania.
La Tri depende en buena medida de ello y Valencia, que se retiró renqueante del estadio Al Bayt, debe recuperarse para aportar el peso ofensivo que precisa el equipo.
Tanto el jugador como el técnico se mostraron convencidos de que los golpes que recibió de los rivales cataríes no le sacarán de la lista de Alfaro.
El delantero, designado como jugador del partido, dijo que pondría toda la ilusión para estar listo el viernes, algo que el «profe» apuntaló: «A ese no lo sacas ni con fuego».
