La Haya.– La selección neerlandesa de fútbol, integrada por 26 jugadores al mando del seleccionador Louis van Gaal, partió este martes hacia Catar, donde jugará el próximo lunes 21 ante Senegal su primer partido mundialista, en medio de las encuestas en Países Bajos subrayan la falta de entusiasmo entre los aficionados neerlandeses por la cita.
El equipo naranja llegará a Doha la tarde de este mismo martes, después de más de seis horas de vuelo desde el Aeropuerto Schiphol de Ámsterdam, y tendrá un pequeño entrenamiento privado con todo el grupo esta noche, aunque el primer entrenamiento oficial de la selección está programado para el miércoles.
El futbolista neerlandés Denzel Dumfries (Inter de Milán) también embarcó en el avión, a pesar de la lesión en la rodilla derecha que sufrió con su club italiano el pasado fin de semana, al no ser el percance tan grave como para cancelar su viaje a Catar y ya participó en gran parte del entrenamiento de ayer, lunes.
Memphis Depay (Barcelona) también viajó con la selección neerlandesa, aunque estuvo casi dos meses fuera debido a una lesión en el tendón de la corva. Van Gaal ya dijo el pasado viernes que el delantero podría formar parte del equipo que va a Catar, pero no estará en la alineación inicial contra Senegal el lunes que viene.
La selección neerlandesa jugará, después, contra Ecuador el viernes 25 de noviembre, y contra el país anfitrión, Catar, el martes 29.
Sin embargo, una encuesta publicada hoy por el programa público EenVandaag muestra que hay muy poco entusiasmo en Países Bajos por el Mundial de Qatar: sólo el 14 % de los neerlandeses, y el 20 % de los aficionados naranjas, están deseando que llegue el torneo de fútbol. La falta de entusiasmo tiene sus raíces en gran medida en la mala reputación de Catar en lo que respecta a la igualdad y los derechos humanos.
Entre las afirmaciones hechas por los encuestados, algunos dijeron: “Lo tengo en mente (el Mundial), pero principalmente en un sentido negativo. En este Mundial realmente te das cuenta de cómo el mundo del fútbol ha sido secuestrado por mucho dinero; y no me perderé algo como el Mundial, pero es todo un poco sucio. Lo veré en casa con las persianas bajadas”.
Solo el 11 por ciento de los aficionados aseguraron que quieren ver el partido en un bar con otras personas, mientras que el 77 por ciento dijeron que lo verán en casa, solos o con sus compañeros.
El Gobierno neerlandés enviará a la ministra de Deportes, Conny Helder, para representar a Países Bajos en Catar durante la primera etapa del torneo, y si la selección neerlandesa avanza a la siguiente ronda, podría ir el primer ministro Mark Rutte, o el rey Guillermo Alejandro, aunque el Ejecutivo no ha tomado aún una decisión.
La Asociación Neerlandesa de Fútbol (KNVB), que ha sido de las pocas asociaciones de fútbol fuertemente crítica con las condiciones laborales en Catar, anunció que subastará las camisetas que la selección neerlandesa usará en este Mundial, y destinará el total de las ganancias de las subastas “a mejorar la situación de los trabajadores migrantes en Catar”.
(ir)