Aunque desde hace varios meses el gobierno había tomado la decisión de no extender el contrato con Semeh, que vence en mayo próximo, y la semana pasada el gerente de la ENEE, Roberto Martínez Lozano, anunció que la empresa se encargaría de dicho servicio a partir de junio del presente año, apenas transcurrieron unos cuantos días para que hiciera público en Honduras el llamado a licitación.
Incluso la misma ENEE se encarga de aclarar que el llamado a licitación se hace porque ya antes se había hecho un «Aviso General de Adquisiciones» en el Development Business del 16 de enero y previamente publicado en línea el pasado 20 de diciembre.
La licitación es bajo un contrato de la Asociación Internacional de Fomento (AIF), del Banco Mundial, para el «Suministro de un Sistema Integrado de Planificación y Gestión de Recursos Empresariales, e Incidencias en la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE)».
En el mismo se establece que las empresas deben ofertar en varios componentes, uno de los cuales es el Subsistema de Gestión Comercial encargado del proceso de «contratación de nuevos suministro de energía eléctrica, ciclo de lectura, ciclo de facturación, ciclo de cobro, control de mora, atención al cliente, control de energía y gestión de pérdidas no técnicas».
Lo anterior significa que el contrato de medición, facturación y cobro que realiza Semeh fue licitado desde el año pasado, aunque la gerencia de la ENEE había anunciado que lo asumirían ellos.
La licitación se contrapone a lo manifestado por el presidente Porfirio Lobo Sosa, ya que el mandatario ha repetido en diversas ocasiones que el servicio que prestaba Semeh sería asumido por el Sindicato de Trabajadores de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica de Honduras (Semeh) y para ello ha dado su palabra públicamente.
Temor
Pero mientras diversos sectores clamaban por un llamado a licitación pública desde hace varios meses, el temor de algunos es que fuera hecho en tiempo estrecho para que alguna empresa en particular fuera beneficiada.
Ese temor parece haberse convertido en realidad, ya que el llamado público a licitación fue hecho público a nivel internacional hace un mes y a nivel nacional apenas en las últimas horas es de conocimiento público y bajo un llamado que poco claro.
El aviso señala que los proponentes interesados tienen hasta el 9 de abril para presentar sus ofertas y en esta ocasión reclaman que el ofertante presente una garantía bancaria de 133,400 dólares, lo que no ocurrió con el contrato de los 100 megas de energía sucia, ya que Wesport Finance todavía no la ha hecho efectiva y el contrato fue firmado previamente.
El gerente de la estatal energética dijo, en un Consejo de ministros, que había establecido conversaciones con empresas que potencialmente podrían prestar el servicio, incluida una israelí.