Tegucigalpa – La dirigencia del transporte público anunció que en el caso de no existir una respuesta a sus peticiones este fin de semana, es inminente un nuevo paro para el próximo lunes 23 de julio a las 5:00 de la mañana.
– En horas de la madrugada los transportistas se reunieron con el presidente Juan Orlando Hernández, pero no se llegó a ningún acuerdo.
– Esta tarde el gobierno convoca a una concertación sectorial para hacer números y ver la factibilidad de eliminar el impuesto al combustible.
El fiscal del sector taxis, Danilo Flores, dijo que en el transporte hay seis modalidades y que todos están unidos en la lucha de lograr una rebaja sustancial el precio del galón de combustible.
#EncuestaPD???? ¿Quién ha mostrado más intransigencia en la problemática del transporte público que derivó en paro nacional dos días de esta semana?
— Proceso Digital (@ProcesoDigital) 21 de julio de 2018
“Nos mantenemos en nuestra lucha de lograr la rebaja de 20 lempiras al galón de combustible, de ahí no nos meneamos y lamentamos la propuesta errática del gobierno de ofrecernos rebajar dos lempiras, eso es una burla para el gremio del transporte”, manifestó.
Continuó que acudirán a una nueva reunión con el gobierno solo si es con el propio presidente Juan Orlando Hernández porque es el único que puede resolver la problemática.
“Hemos hablado más de 60 horas con representantes del gobierno y nos han hecho propuestas que son una verdadera burla”, lamentó.
Remarcó que “nos mantenemos en nuestra posición e invitamos al pueblo hondureño para que se sume a la presión que hacemos para lograr bajar el precio del galón de combustible”.
Flores puntualizó que “estamos en negociaciones y mantenemos reuniones constantes a nivel de transporte en todo el país, las bases nos dan las órdenes y nosotros solo las cumplimos”.
Por su parte, el dirigente del transporte Jorge Lanza afirmó que la reducción en el precio del combustible es una exigencia que beneficiará a todo el pueblo.
Dijo que siguen abiertos al diálogo con el gobierno, aunque mencionó que “es mejor un mal arreglo que un buen pleito”.
Sobre la propuesta gubernamental de convocar a diversos sectores para llevar a cabo una concertación sectorial y definir una respuesta a los transportistas, refirió que no están de acuerdo porque cuando se involucran a otras partes se empantanan las negociaciones.
Para esta tarde está planificada una movilización del transporte siempre como medida de presión para lograr la rebaja al precio del galón de combustible.
Pretenden desmontar al Estado
Por parte del gobierno, el ministro de la Presidencia, Ebal Díaz, dijo que siguen a la espera de conocer por parte del sector transporte cuánto le bajarán al costo del pasaje al usuario en el caso que logren una rebaja en el valor de los combustibles.
“Si se da eventualmente esta rebaja a través de la eliminación del impuesto a los combustibles, queremos saber que el sector transporte diga cuántos lempiras le bajará a la tarifa, para que a partir de ahí empecemos a hacer números sobre la petición”, explicó.
Ebal Díaz, ministro de la Presidencia.Díaz agregó que la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC) ha propuesto que se rebaje el Impuesto Sobre Ventas (ISV) y el Impuesto Sobre la Renta (ISR), “entonces ahí ya tenemos tres propuestas, eso significa que el Tesoro Nacional estaría siendo sometido a un drenaje de recursos que evidentemente va a llevar al Estado a un sacrificio monumental”.
Especificó que si el impuesto a los combustibles significa un poco más de 13 mil millones de lempiras y “solo va a beneficiar a los que tienen vehículos que son menos de 1 millón de personas, el resto de los hondureños no tienen carro, y si vamos a escuchar más adelante a otros gremios que dicen que hay que bajar el Impuesto Sobre Ventas porque ese si los afecta a todos, entonces hay que ver esas posiciones”.
Apostilló que existen demandas de empleados públicos que piden aumentos de salarios.
“Si le vamos a quitar al Presupuesto Nacional de Ingresos los 13 mil millones que piden los transportistas, y 7 mil millones de lempiras si bajamos tres puntos al Impuesto Sobre Ventas, ahí hablamos de 20 mil millones de lempiras; y si además viene la petición que hay que bajar el Impuesto Sobre la Renta que serían 10 mil millones, hablamos de 30 mil millones… entonces aquí estamos desmontando el Estado”, reflexionó.
Por lo anterior, dijo que han convocado a diversos sectores para una concertación social y definir una respuesta para el sector transporte. “Es necesario que todos nos escuchemos y si ese es el acuerdo y por ahí se empieza a caminar pues que los alcaldes que reciben más de 2 mil millones de lempiras en transferencias sepan que se van a eliminar; que nos olvidemos de los aumentos y ajustes de empleados; tendremos que sacrificar programas sociales y despedir empleados porque el ajuste hay que hacerlo”.