San Francisco, EEUU – El hondureño Olvin Didier Centeno Gámez se declaró culpable hoy de tres cargos de posesión con la intención de distribuir una sustancia controlada dentro de 1000 pies de una escuela, y un cargo de reingreso ilegal a Estados Unidos luego de la deportación, anunció el Fiscal Federal en funciones Alex G. Tse y el Agente Especial de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) Ryan L. Spradlin.
Al declararse culpable de las infracciones de sustancias controladas, Centeno Gámez, de 36 años, ciudadano de Honduras, admitió que el 18 de abril de 2018 estaba en el distrito Tenderloin de San Francisco y en posesión de heroína, metanfetamina y cocaína que tenía la intención de distribuir.
Centeno Gámez admitió además que, en el momento de su arresto, se encontraba a menos de 1000 pies de una escuela primaria local. El hondureño también admitió que volvió ilegalmente a Estados Unidos después de haber sido deportado en cinco ocasiones previas entre 2009 y 2017.
Un gran jurado federal acusó a Centeno Gámez el 17 de mayo de 2018, acusándolo de tres cargos de posesión con la intención de distribuir una sustancia controlada a 1000 pies de distancia de una escuela y un cargo de reingreso ilegal en los Estados Unidos después de la deportación. Hoy, Centeno Gámez se declaró culpable de todos los cargos en la acusación.
