Por: Pedro Gómez Nieto
Difundido por la OEA el informe final de los comicios, procede exponer negro sobre blanco algunos puntos que considero interesantes, en la confianza que permita a los lectores distinguir el árbol dentro del bosque porque, como ya he repetido profusamente, hay políticos que utilizan maliciosamente el neolenguaje para cambiar el sentido original de las palabras y, recordando a Orwell: “Si se corrompe el lenguaje se corrompe el pensamiento y, con ello, se termina por destruir la democracia y la libertad, pues ambas reposan en verdades que ya no son reflejadas en el lenguaje”.
Este informe final anula el preliminar. No se puede jugar con dos barajas simultáneamente, acudiendo al primero cuando aquí no encontremos argumentos para defender una posición favorable. Las declaraciones irresponsables y precipitadas – a título personal- de Almagro ante el informe preliminar, sin esperar al definitivo, evidentemente han servido para presionar e inducir a sus empleados a redactar algunas conclusiones de manera ambigua, permitiendo una doble interpretación, puesto que el jefe se había ya posicionado en un sentido bien definido. Asumiendo ese lastre procedamos.
Observemos lo que dice el informe:
- Pág. 10: “La candidata presidencial electa por el partido Libre fue relegada a la vicepresidencia para nombrar como candidato a Salvador Nasralla, quien no presentó movimientos que lo representaran en ninguno de los partidos que conformaron la Alianza… La MOE/OEA considera oportuno destacar que la posibilidad de realizar alianzas una vez convocadas las elecciones generales y nombrar un candidato distinto al electo en las primarias, AFECTA LA CERTEZA JURIDICA de este tipo de procesos Y LOS DERECHOS POLITICOS ELECTORALES de los ciudadanos que participan en él.”
El informe claramente expone que Nasralla no podía ser el candidato de la Alianza, sino la candidata que fue elegida por el pueblo en las internas. Supongo que esto molestará a sus seguidores, pero si aceptamos este informe lo debemos hacer con todas las consecuencias. Por cierto, busquen en el informe la palabra fraude o similar…, no la encontrarán.
- En las conclusiones, el informe determina problemas:
Pag.33.- Antes del proceso: Polarización social a cuenta de la sentencia judicial que permite la reelección; las debilidades estructurales del marco jurídico electoral y el cambio del proveedor del sistema de transmisión de datos.
– Lo que no dice es que: esa polémica sentencia judicial, emitida por dos diferentes CSJ, fue aceptada por los partidos políticos cuando decidieron presentarse al proceso electoral de las internas con sus movimientos políticos, asumiendo las debilidades estructurales del marco jurídico electoral; y reconociendo al TSE que determino los movimientos y candidatos ganadores para las generales.
A pesar de las irregularidades concomitantes del sistema electoral hondureño, todos los partidos aceptaron los resultados de las internas.
Pag.33.- Durante el proceso: “El horario confuso del cierre de mesas, que aunque legal fue inusual y dejó a gente en colas de votación”.
– Se detecta malicia en ese comentario, tendente a generar suspicacia. Lo que es legal y se ajusta a ley no puede ser nunca inusual, porque entonces lo usual puede ser lo ilegal. Nadie puede afirmar que esos potenciales votos fueran para una sola opción política, por lo tanto perjudicaron por igual a todos los partidos.
Pag.33.-Después del proceso, la MOE/OEA detecta irregularidades que no le permitirían validar un proceso sin resolverlas previamente, pidiendo al TSE “seis pasos detallados”, que el TSE cumplimenta. Seguidamente el informe dice: “La Misión agradece el reporte entregado por el TSE con información sobre la implementación de las actividades recomendadas por la MOE/OEA. Así mismo, es importante destacar que durante las dos últimas semanas los expertos de la Misión observaron de manera directa los procedimientos llevados a cabo.” “En relación con la revisión y el cotejo de actas, a MOE/OEA consideró como positivo que el TSE decidiera que se contaran todas las boletas… La MOE puede concluir que en casi la totalidad de las actas hay coincidencia entre las oficiales y las obtenidas por los partidos”.
Finalizando el informe observamos el siguiente párrafo: “A partir del análisis presentado en este reporte… la MOE considera que ha observado un proceso de baja calidad electoral y por ende no puede afirmar que las dudas sobre el mismo estén hoy esclarecidas”. Párrafo que nunca se puede interpretar en el sentido de que resueltas esas dudas determinarían la existencia de un fraude, simplemente expone que la Misión no disponía de las capacidades necesarias para solventarlas.
Sumando estas conclusiones al informe de la UE, que sí envió técnicos especialistas en informática y análisis electoral, junto al reconocimiento de países integrados en la OEA al triunfo nacionalista, por el bien de Honduras y el prestigio de la OEA, Almagro debería disculparse por sus comentarios personales, emitiendo un comunicado oficial favorable a los comicios.