Tegucigalpa– El abogado Ramiro Medina denunció este lunes que durante el fin de semana se registraron doce nuevas invasiones de tierra en el municipio de Tela, Atlántida, lo que agrava la crisis de inseguridad jurídica y violencia en la zona.
Según Medina, grupos armados y de choque se desplazaron desde el sábado por la noche hacia distintas propiedades rurales, donde se han producido anuncios preocupantes de posibles enfrentamientos entre grupos rivales.
“Lamentablemente hay gente armada, hay grupos de choque; desde el sábado en la noche se escuchan amenazas y movimientos peligrosos. El problema es que la situación se está saliendo de control”, advirtió el abogado.
De acuerdo con el reporte, 12 propiedades fueron tomadas durante el fin de semana, supuestamente por parte de grupos de afrodescendientes. Las invasiones ya no se limitan a terrenos rústicos, sino que afectan propiedades privadas productivas, entre ellas una de 120 manzanas, otra de 80 y una de 200, todas cultivadas con palma africana.
Medina señaló que las tomas se extienden más allá del casco del sector Triunfo de la Cruz, abarcando incluso áreas del municipio de Arizona y la propia ciudad de Tela. “Estas propiedades ya no están dentro del perímetro que contempla la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos” (CIDH), subrayó.
El abogado denunció además que en Tela existen alrededor de 1,200 invasiones, algunas dentro y otras fuera del área señalada por la sentencia de la Corte Interamericana.
“La situación está muy difícil; la gente anda armada, la policía no tiene el control y las autoridades están haciendo de la vista gorda. No hay seguridad jurídica. En Tela hay más desplazamientos que en Trujillo”, expresó.
Medina agregó que muchos empresarios locales están preocupados, ya que el Instituto de la Propiedad ha dejado de inscribir nuevas propiedades en la zona debido a los conflictos territoriales.
“En Tela ya no se puede inscribir una propiedad. Las instituciones están paralizadas mientras las invasiones aumentan”, lamentó.
Las invasiones de tierra continúan siendo uno de los principales focos de tensión en Atlántida, donde productores y empresarios exigen al gobierno medidas concretas para garantizar la seguridad y el respeto a la propiedad privada.LB
