Tegucigalpa (especial Proceso Digital por Ronald Ordóñez)- En el corazón de Intibucá, un departamento donde las montañas susurran historias de lucha y resiliencia, un grupo de mujeres ha tejido una red de solidaridad que trasciende generaciones. La Organización Intibucana de Mujeres Las Hormigas, fundada el 26 de abril de 2001, es mucho más que una asociación; es un faro de esperanza para las mujeres que enfrentan la pobreza, la violencia y la discriminación en una de las regiones más vulnerables de Honduras.
-Las Hormigas cuentan con un consultorio jurídico que acompaña legalmente a las mujeres de los distintos municipios en la búsqueda de justicia. Además brinda capacitaciones en las comunidades sobre derechos humanos.
“Mujeres Lencas tejiendo hilos de esperanza hacia una vida libre de violencia”, es uno de decenas de proyectos impulsados desde Las Hormigas.

Eva Sánchez, directora ejecutiva de Las Hormigas, contó a Proceso Digital que todo comenzó en el año 2000, cuando las calles de La Esperanza, Intibucá, se llenaron de voces unidas durante la Marcha Mundial contra la pobreza y la violencia hacia las mujeres.
En ese clamor colectivo, un grupo de intibucanas decidió que no bastaba con alzar la voz una vez; era necesario crear un espacio permanente para defender los derechos de las mujeres. Así nació Las Hormigas, un nombre que evoca la tenacidad y el trabajo colectivo de estas criaturas pequeñas pero poderosas, capaces de mover montañas con su esfuerzo conjunto, narró.
Desde su fundación, Las Hormigas se ha dedicado a la defensa de los derechos humanos, la capacitación y la sensibilización, con un enfoque especial en mujeres de escasos recursos económicos. Legalizada en 2004, la organización ha trabajado incansablemente para garantizar que las mujeres intibucanas tengan un espacio donde sus voces sean escuchadas y sus derechos, respetados.

Las Hormigas
La directora de Las Hormigas recordó que al inició hubo varias propuestas de nombre, sin embargo se decidió el nombre de Las Hormigas por su tenaz fuerza de trabajo y unidad. “sí tocan a una, todas respondemos”, parafraseó.
Actualmente brindan servicios de acompañamiento legal a varias redes de mujeres en La Esperanza, Intibucá, La Paz y Lempira, explicó. Cuentan con un consultorio jurídico ubicado en Intibucá, pero que brinda acompañamiento a las mujeres en las distintas comunidades.

También se forman redes de mujeres y se fortalecen otras que ya existen, todas reciben capacitación sobre sus derechos y se les brinda acompañamiento permanente, apuntó.
Sin embargo, se trabaja en la construcción de casa refugio para mujeres, ya se cuenta con el terreno, ahora falta la gestión de los fondos para la construcción.
Además se brinda acompañamiento psicológico a las mujeres de esa zona del país.
Su trabajo se centra en comunidades rurales donde las mujeres enfrentan desafíos como la falta de acceso a la educación, la violencia de género y la exclusión de espacios de decisión. Uno de los logros más destacados de la organización ha sido la creación de la Agenda Estratégica Municipal de las Mujeres, un documento que refleja las problemáticas específicas de las mujeres intibucanas, acotó.
Además, Las Hormigas ha sido un pilar en la lucha contra el femicidio, un flagelo que azota a Honduras, donde una mujer es asesinada cada dos días. Estas acciones no solo denuncian la violencia, sino que fomentan una cultura de respeto y equidad desde las nuevas generaciones, es decir propician espacios educativos entre las redes de mujeres con el objetivo de desarrollar acciones de prevención entre las nuevas generaciones.

Impacto cultural
Más allá de su activismo, Las Hormigas ha tejido una narrativa cultural que honra la identidad lenca y la fortaleza de las mujeres intibucanas. A través de proyectos como Luna Maqui (Luna Nueva en lenca), apoyado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y ejecutado por OXFAM, la organización ha fortalecido el liderazgo de más de 2 mil 400 mujeres indígenas lencas y campesinas en Intibucá y La Paz.
Este proyecto no solo promueve la igualdad de género, sino que también reivindica los derechos indígenas y la conexión con la tierra, elementos centrales de la cosmovisión lenca.
La organización está conformada por 45 mujeres, la mayoría lenca, pero su impacto positivo se traslada a miles de mujeres, dijo Sánchez.
Explicó que con el asesoramiento y acompañamiento que brindan logran impactar en la vida de miles de mujeres, al punto que en varios municipios del occidente del país ya se realizan cabildos abiertos exclusivo de mujeres donde se expresan sobre los problemas de sus comunidades y en conjunto buscan alternativas de solución.

Su mayor sueño
Sánchez contó a Proceso Digital que el mayor sueño de Las Hormigas es contar con una casa refugio, un objetivo planteado desde que se inició la organización.
Sin embargo, eventos como la pandemia o el cierre de operaciones de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) han impactado fuertemente en este sueño.

Resumió que han logrado obtener la donación del terreno que servirá para este proyecto.
Sin embargo, tras su solicitud a varios gobiernos e instituciones, las respuestas gubernamentales han sido nulas.
Lamentó que el gobierno le dé la espalda a este tipo de iniciativas que sí cuenta con el respaldo de organizaciones internacionales.
Sin embargo, aunque existe apoyo de varios organismos, no es suficiente para poder construir una casa refugio y garantizar su funcionamiento, explicó.
No obstante, es un sueño por el que trabajan y el cual aseguran que cumplirán en un mediano plazo.

Llamado a la acción
La labor de Las Hormigas no se detiene, pero necesita el apoyo de todos los hondureños.
La organización invitó a la ciudadanía a sumarse como voluntarios, donar para sostener sus proyectos o simplemente difundir su mensaje.

“Con tu apoyo, contribuyes a cambiar vidas en las comunidades de mujeres intibucanas”, reza uno de sus principales lemas.
Las mujeres que apoyan a otras mujeres realizan constantes actividades como venta de ropa, tamalitos, chocolates, joyería u otras artesanías para poder sostener los gastos de operación.
Si desean colaborar pueden escribirnos al correo info@lashormigas.org o llamar a los teléfonos 9692-3495 o 2783-3947, dijo.

¡Mujeres a votar!
En un mensaje dirigido a las mujeres de Honduras, recordó que Honduras está en un apogeo político y las mujeres deben ejercer el derecho por el que lucharon otras mujeres.
Al respecto, invitó a todas las mujeres a votar el próximo 30 de noviembre y elegir a sus próximas autoridades.
“Mujeres, debemos elegir autoridades sensibles al tema de derechos de las mujeres, que no sean agresores, ni deudores de manutenciones. No podemos seguir eligiendo hombres que luego entorpecen las leyes o políticas que se proponen desde las mujeres”, zanjó.
En un país donde las mujeres enfrentan desafíos estructurales, Las Hormigas son un recordatorio de que el cambio es posible cuando se trabaja con corazón y compromiso. Su legado es una invitación a todos los hondureños a construir una sociedad más justa, donde nadie sea invisible y todas las voces cuenten. (RO)
