Roma – El Nápoles no pudo pasar este domingo del empate ante un gran Udinese (1-1) y volvió a desaprovechar un pinchazo del Inter de Milán para, pese a quedarse en el liderato, cosechar un colchón de solo 4 puntos a falta del partido del combinado interista.
El Nápoles perdió otro tren importante. La pasada jornada encajó el empate en el tiempo añadido ante el Roma cuando tenía los 3 puntos en el bolsillo. Y ante el Udinese volvió a adelantarse con una alegría que duró apenas los 2 minutos que tardó Ekkelenkamp en igualar el tanto de McTominay. Otra jornada en la que inició bien pero no terminó de cerrar el éxito.
Son ya dos empates seguidos de los de Antonio Conte en el peor momento de la temporada. Porque han coincidido con una derrota y un empate del Inter, su principal perseguidor; y con una victoria del Atalanta, que asoma a 5 puntos.
Fue un partido duro para el Nápoles en el Diego Armando Maradona. Salió con todo, pero se topó con la valentía de un Udinese que tuvo la personalidad de mirar a los ojos al líder con un Flo Thauvin estelar.
Se dividieron los ataques, las amenazas. Lucca y Thauvin para el Udinese; Lukaku y Politano para el Nápoles. Hasta que emergió la figura del gigante escocés para decantar la balanza con un testarazo en el minuto 38. Sexto gol para McTominay en Serie A, séptimo en una temporada brillante en la que es titular indiscutible. Un recurso ofensivo que funciona jornada tras jornada.
Se las prometió felices el combinado partenopeo con ese gol que suele significar que el Nápoles se acerca a la victoria. Pero el Udinese decidió saltarse la norma y cualquier tipo de tiempo de recuperación tras haber encajado el duro golpe. No pasaron ni 2 minutos cuando el Nápoles, en una serie de desastres defensivos, se vio superado.
Fue una jugada catastrófica. Juan Jesús le quitó del área pequeña el balón a Meret y despejó a banda. Mazzocchi intentó evitar el regalo de posesión, pero su intento de despeje empeoró las cosas. El balón acabó en los pues de un desvergonzado Ekkelenkamp que no dudó en sacar un latigazo desde la frontal, pese a ester muy escorado, y sorprender con el gol de la noche.
La dinámica no cambió demasiado en la segunda mitad. El líder de la Serie A no tiene fondo de armario, como tantas veces ha comentado Antonio Conte, y el Udinese consiguió neutralizar perfectamente los arreones e incluso buscar la sorpresa en el Maradona, que tuvo que conformarse con el empate. El segundo consecutivo. Amargo por no poder distanciarse definitivamente de un Inter que, en caso de ganar a la ‘Fiore’, se pondrá a solo 1 punto.
— Ficha técnica:
1 – Nápoles: Meret; Di Lorenzo, Rrahmani, Juan Jesus, Mazzocchi; Anguissa (Raspadori, m.72), Lobotka (Gilmour, m.81), McTominay; Politano (Ngonge, m.72), Lukaku (Simeone, m.72), Neres (Okafor, m.88).
1 – Udinese: Sava; Kristensen, Bijol, Solet (Ehizibue, m.80), Kamara; Atta (Bravo, m.80), Karlstrom, Lovric; Thauvin, Ekkelenkamp (Zarraga, m.86); Lucca.
Goles: 1-0, m.38: McTominay; 1-1, m.40: Ekkelenkamp.
Árbitro: L. Marinelli. Mostró tarjeta amarilla a Lucca (m.54) por parte del Udinese.
Incidencias: encuentro correspondiente a la vigésimo cuarta jornada de la Serie A, disputado en el Estadio Diego Armando Maradona de Nápoles (norte). EFE