Tegucigalpa – El expresidente Porfirio Lobo Sosa (2010-2014) entregó a la OABI la residencia que compartía con su esposa Rosa Elena Bonilla de Lobo, cumpliendo una orden dictada por las instancias judiciales de Honduras.
– Cinco días antes de la captura de su esposa Rosa Elena Bonilla fue informado de las acciones que vendrían por presiones de la MACCIH, reveló Lobo.
El acto se realizó en la aldea El Chimbo, donde se encuentra la residencia del exmandatario y que estaba a nombre de Bonilla de Lobo, quien se encuentra detenida en un centro de detención femenina en Támara, por disposición de la juez que conoce el caso.
La Fiscalía General de Honduras, por medio de su unidad especializada UFECIC, acusa a la exprimera dama de haberse apropiado de fondos públicos y de otros cargos, por lo cual pidió que le incauten sus bienes, entre los que se encuentra la residencia en la que vivió Lobo Sosa con su esposa e hijos.
La Unidad Fiscal Especial Contra la Impunidad y la Corrupción (UFECIC) actúa en este caso coordinada con la Misión de Apoyo Contra la Corrupción e Impunidad de Honduras (MACCIH), una instancia internacional que opera bajo el mandato de la Organización de Estados Americanos (OEA).
En ese sentido, Lobo Sosa dijo que recibió una orden para abandonar la residencial y le dieron 30 días para desocuparla, a fin que la Oficina Administradora de Bienes Incautados (OABI) comience a manejar la misma.
“Ayer vine y me encontré que aquí estaba mi banda presidencial todavía y lógicamente esa va conmigo toda la vida, igual que muchas cosas que son inolvidables. Esta casa en la cual crecieron mis hijos, y créanme me da pesar, porque mi Rosa terminó de pagar esta casa en 2004, tenemos más de 20 años de vivir en esta casa, pero la ley es la ley, soy un hombre obediente de la ley y vengo con la frente en alto de hacer entrega de esta residencia”, desglosó.
Criticó que han existido muchas irregularidades acompañadas de atropellos en el proceso judicial incoado en contra de su esposa.
Lobo Sosa reveló que la jueza encargada del caso, Vera Barahona, fue fiscal del Ministerio Público, mientras el hoy encargado de la UFECIC, Luis Santos, fungió como jefe de la juez en su momento.
Rosa es presa política
Lobo Sosa calificó a su esposa Rosa Elena Bonilla como una “presa política”, producto de decisiones de cinco personas desde Casa Presidencial, a quienes llamó “los cinco jinetes del apocalipsis”.
No mencionó los nombres de estas personas que estarían detrás de las acciones judiciales contra la exprimera dama, Rosa Elena de Lobo.
El exgobernante ofreció conferencia de prensa esta mañana luego de entregar su residencia ubicada en El Chimbo a la Oficina Administradora de Bienes Incautados (OABI), quien le ha asegurado 11 propiedades por el caso “Caja Chica de la Dama”.
“Quiero decir que voy a definir a mi Rosa como un prisionero político de la decisión de los famosos cinco tomaron en Casa Presidencial, ellos tomaron esa decisión y el proceso por eso está viciado, está forzado porque no hay fundamento legal y lo miraremos cuando lleguemos a la Corte Suprema de Justicia, donde estoy seguro y espero que se va a aplicar la ley como debe aplicarse y mi Rosa podrá recuperar su libertad”, afirmó.
Seguidamente, afirmó que “aquí estoy de pie, firme, cero resentimiento con mi partido porque es el gobierno de mi partido podría estar molesto, no estoy molesto, no es mi partido, son los cinco jinetes del apocalipsis, esos son y a esos voy a recordarles que poema de Bertolt Brecht (Y por mi vinieron…)”.
El expresidente Lobo pidió: “No seamos indiferentes ante las injusticias, ante los atropellos y ante las violaciones a los derechos de las personas. Ningún fin político está por encima de la gente, ningún beneficio político está por encima del respeto a la dignidad de la persona humana”.
Al ser consultado sobre los nombres de los cinco jinetes del apocalipsis a los que hace alusión, el exmandatario respondió: “Dejen algo para adelante ombe, dejen algo para más allá”.
A las repreguntas de los periodistas en torno a los referidos cinco jinetes del apocalipsis, narró que “dijeron que ocupan algo que dar, algún resultado que dar como que demostrara que habían éxitos… vean ustedes cómo va ser mentiras, viene un amigo a la casa y me dice: ‘mire han decidido que hay que darle algo a la MACCIH y que ese algo es doña Rosa, ya le tienen el lugar en Cefas (cárcel femenina)’, ajá y a los cinco días pasa, ¿eran mentiras?”.
Haciendo gesticulaciones afirmó que “allá arriba hay un Dios que mira todo y que nadie se va de esta vida sin pagar las malas acciones”.
Lobo Sosa tuvo palabras de agradecimiento para el abogado Julio Ramírez, quien defiende a la exprimera dama Rosa Elena Bonilla Ávila. “Aquí estamos de pie luchando hasta que mi Rosa vuelva al lugar que le corresponda”, reafirmó.
