La feria del agricultor: sabores, colores y aromas que abaratan la vida de los capitalinos

– La feria es una alternativa a los altos costos de la canasta básica.

– Más de 45 mil hondureños se atienden cada fin de semana la feria del Agricultor y el Artesano.

– Es la fuente de encuentro de capitalinos de todos los estratos socio económicos. La gente la visita por los precios, la frescura y calidad de los alimentos.

– El salario mínimo va desde 4 mil 870.31 hasta 7 mil 582.86 en el país.

Uno de esos productores es Pablo, vende las zanahorias que siembra en su parcela de Lepaterique, él también es padre de un pequeño al que incorpora a la faena para ganarse una remuneración bien merecida los fines de semana, cargando los productos de alguna comparadora como Margarita.

Pasadas poco más de dos horas de andar de puesto en puesto, Margarita se detiene en el negocio de Yolanda, una mujer que desde hace un par de décadas vende bebidas refrescantes de colores y sabores diferentes, todas naturales. Allí disfruta de un refresco de maracuyá. Está gratamente cansada y satisfecha, se ha encontrado a conocidos, ha regateado precios, ha seleccionado los mejores de los mejores vegetales y lleva bastante de lo que necesita.

Es hora entonces de emprender el regreso a casa y a la realidad de reajustar el presupuesto, porque ella requiere pagar el alquiler de su pequeña vivienda, el transporte urbano que en la modalidad de los llamados buses amarillos (los más baratos), cada vez es más escaso e inseguro y además reacomodar los otros gastos.

Ese peso, de todos los costos que deberá asumir, es superior por mucho al de su canasta alimenticia, adquirida en la excepcional atmósfera de la feria del agricultor, en las cercanías del estadio Nacional hondureño.

Altos costos de la canasta básica

En el mismo escenario, Bertha Cerrato, cambió la despensa de su barrio por la Feria del Agricultor y El Artesano debido a que asegura que ahí los precios son más cómodos. “Antes compraba en el mercadito de la colonia, ahora compro en el mayoreo para poder comer lo mismo” dijo.

Pero incluso en la Feria del Artesano y El Agricultor los precios son considerados no del todo accesibles para algunas compradoras como Alda Pineda, madre de tres hijos quien optó por cambiar sus hábitos alimenticios para ajustar sus posibilidades. “He cambiado por otros alimentos porque ya no se puede comprar lo que se compraba antes, ya el presupuesto no nos da”, se quejó.

Para este junio la canasta básica en Honduras alcanzó el precio de 7 mil 237.61 lempiras; en comparación con el salario mínimo, que va desde 4 mil 870.31 hasta 7 mil 582.86 lempiras dependiendo del rubro y otros factores.

El Mercado

La Feria del Agricultor es un mercado especial, es como un punto de encuentro transversal de las gentes en la capital hondureña.

Sus clientes son desde mujeres que hacen frente a sus economías raquíticas, que balancean, suman y restan lempiras, hacen maromas con libras y medidas para adquirir vegetales, lácteos, frutas y granos, hasta esqueléticas damas que encuentran allí los más equilibrados vegetales y frescos pescados para sus dietas. Igualmente desfilan diplomáticos, banqueros, artistas y hasta uno que otro burócrata de esos que tras volverse poderosos económicos se incomodan al pisar una cáscara de plátano.

Es usual encontrar en la feria a la embajadora estadounidense Lisa Kubiske, quien junto a su esposo disfrutan la compra y desayunan en un local de comida típica.

Roque Zelaya, el famoso pintor primitivista parece beberse a retazos los colores de la plaza para luego plasmarlos en su lienzo.

No falta en el escenario un general en el retiro, de aquellos de los que la historia no quisiera acordarse mucho. Futbolistas, basquetbolistas, maestros jubilados de tantas generaciones, médicos, albañiles, costureras, también contrastan en la amplia plaza. Y en las épocas como ésta, preelectorales, llueven en el escenario los candidatos a cargos de elección popular, van de puesto en puesto, haciendo una especie de “evangelización política”, pero su trillado discurso, sus promesas absurdas, les hacen más bien incomodar y des configurar la armonía de la escena.

“Es tan bonito el mercado tan lleno de colores, olores y de sabores, a mí me encanta me gusta el espectáculo visual que el mercado te ofrece, lo disfruto mucho me gusta venir los sábados”, aseguró la cantante hondureña Karla Lara.

Así como Karla disfruta la Feria del Agricultor y el Artesano, en ella se atienden entre 45 mil a 50 mil compradoras y compradores cada fin de semana, aseguró Eva de Urraco, miembro de la junta directiva del mercado.

Generando empleo

En la feria se comercializan las cosechas de pequeños productores en 720 puestos lo cual permite ofrecer a más bajo costo su mercadería.

En ese sentido Elmer Varela, uno de estos pequeños comerciantes de la feria nos asegura que “la primera ventaja que tenemos es que el producto es fresco y es directamente del productor al consumidor y en segundo lugar podemos ofrecer seguridad”.

Aunque los productores no son ajenos a las alzas de precios principalmente causadas por el incremento en los combustibles y los fenómenos climáticos como inundaciones y sequías si son un ejemplo de organización y productividad de un modelo que demuestra funcionar y crea incluso trabajos adicionales.

En la feria por lo menos 130 niños con carretas de madera brindan un servicio de carga por una cuota que queda a discrecionalidad de los clientes.

Estos pequeños a los que se les llaman “triunfadores”, son un grupo de niños y jóvenes organizados por la junta directiva hijos de los mismos socios que tienen sus puestos en la feria.

Mercados seguros

Otro de los puntos a favor de la feria es la seguridad, que gracias a una donación de la embajada de Estados Unidos mejoraron con la implementación de cámaras de vídeo cómo nos cuenta una de las miembros de la junta directiva de la feria, Eva de Urraco . “Sabe cuál es la ventaja, la seguridad que brindamos nosotros a nuestra amada clientela, una seguridad que no brinda ningún otro mercado, contamos con un servicio de cámaras de video donde ya están colocadas y cubren toda la zona gracias a la embajada americana que son los que nos pusieron esas cámaras y aprovecho ahorita para darles las gracias a ellos”, dijo.

La junta directiva que maneja la Feria del Agricultor y el Artesano está conformada por los mismos pequeños productores de diversas comunidades Mateo, Soroguara, Lepaterique y Tatumbla, entre otros.