Tegucigalpa – En una entrevista con Proceso Digital, el titular de Seguridad, general (r) Julián Pacheco Tinoco, exteriorizó sentirse “inconforme” con la depuración en el cuerpo del orden, al tiempo que anunció el envío de un proyecto de reforma a la Ley Orgánica de Policía Nacional, así como una norma para regular a los miembros de la carrera policial.
– Solicitarán reforma a la Ley Orgánica de la Policía para enmendar entuertos.
– En operaciones para contrarrestar el narcotráfico, estamos en alerta permanente porque si no el país se nos vuelve a venir abajo, afirmó.
– No son 20 órdenes de captura para extraditables las que tiene en su escritorio, únicamente son cuatro, dijo.
El funcionario recibió en su despacho a este medio de comunicación digital y abordó temas como el narcotráfico, inseguridad ciudadana, depuración policial y la reducción de la seguridad personal al exjefe policial, Ramón Sabillón Pineda.
De la oficina de Pacheco Tinoco, ubicada en la salida a Mateo en la periferia de Tegucigalpa, salían y entraban altos jerarcas policiales, quienes participaron en una reunión rutinaria para tratar temas de seguridad ciudadana.
El oficial con formación militar confesó que muchas veces existen jefes policiales que son reasignados a otros términos municipales aunque les acompañe una reciente gestión con pobres resultados.
“El tema de reasignarlos es porque no hay más oficiales de donde echar mano para reemplazarlos, es algo así como una segunda oportunidad”, refirió.
Sobre la petición de una veintena de congresistas de Estados Unidos de retirar la ayuda económica a Honduras por las constantes violaciones a los derechos humanos por parte de los cuerpos de seguridad del Estado, el general Pacheco aseveró que el país debe acostumbrarse a trabajar con recursos propios.
Un poco más suelto para hablar en comparación a cuando fungió como titular de la Dirección Nacional de Investigación e Inteligencia (DNII), el funcionario respondió sin ambages cada una de las interrogantes:
Proceso Digital (PD): A propósito de la depuración policial, la gente critica que cuando un jefe departamental es removido por sus pobres resultados, lo trasladan a otro departamento, ¿Acaso eso no es reubicar el fracaso?
Julián Pacheco Tinoco (JPT): Eso tiene una explicación. A veces se sacan de unas zonas por un problema de índole de seguridad, otros casos por bajo rendimiento o bajos resultados.
El tema de reasignarlos es porque no hay más oficiales de donde echar mano para reemplazarlos, es algo así como una segunda oportunidad. La depuración comienza con la evaluación de resultados.
La mejor depuración son los resultados, entonces el jefe policial que es trasladado a otro lugar mira que no dio resultados y al siguiente escalón en sus nuevas responsabilidades está consciente que ya no califica para eso.
Estamos creando una especie de pirámide, pero basada en resultados y eso es depuración, eso es lo que no ha habido en la Policía, exigirle resultados a sus efectivos.
El Estado está invirtiendo en patrullas, combustibles, uniformes, alimentación y salarios, entonces lo menos que nos pueden ofrecer son resultados.
PD: ¿Personalmente, está satisfecho con la depuración?
JPT: No estoy satisfecho, porque estoy trabajando para el futuro, es decir que el problema de la depuración como lo he planteado es complejo porque pasa por mucho proteccionismo legal. Yo le apuesto hacia la evaluación interna, que sean los jefes superiores los que vayan evaluando y determinando quien pasa las pruebas y quién no.
También existen otras exigencias: las de capacitación, de resultados, disciplinarias, entonces estamos avanzando en eso, le apostamos a una depuración en el mediano y largo plazo.
Este año para poner un ejemplo, no pienso en resolver el problema de depuración, lo planteo legalmente en una reforma legal que será enviada en un proyecto de ley al Congreso Nacional para solicitar la reforma a la Ley Orgánica de la Policía y también la creación de la carrera policial que no la tenemos.
PD: ¿En qué consisten esas reformas?
JPT: Primero es darles más facultades al general director y a los jefes policiales para que ellos puedan desde adentro tomar decisiones y resolver la clasificación de personal. Segundo, que el general director como máxima autoridad también tenga la facultad para aplicar el principio de idoneidad.
Debe haber idoneidad para vestir el uniforme, para hacer un trabajo de investigación, para desempeñar un cargo porque se pueden tener todas las capacidades académicas y técnicas, pero hay un requisito que no lo cumple, no le gusta trabajar, no es confiable… entonces a esa gente se va apartando.
Lógicamente necesitamos un esquema legal, ya no se trata de una situación antojadiza del ministro, ni una libertad del director general. A eso le apostamos para poder modernizar la Policía.
PD: Hablando del general director de la Policía, el actual no es muy mediático ¿eso es bueno o malo?
JPT: Me parece que nos tenemos que dedicar a trabajar, los resultados de él se deben de ver en las calles, con sus estrategias, supervisión y resultados. Él ha dado muchos resultados, la Policía ha mejorado mucho en los últimos meses y ese es un mérito que tiene como general director.
PD: La otra semana entra en vigencia la nueva unidad de investigación de la Policía ¿Qué pasará con el personal de la DNIC?
JPT: Unos pasarán a otras unidades de la Policía y otros quedarán al margen. Habrá un proceso de readiestramiento. Ninguno de los agentes actuales de la DNIC pasará a la Dirección Policial de Investigación (DPI), repito irán a otras policías bajo un proceso de reciclaje.
PD: ¿Existen archivos de la antigua DNI y la actual DNIC?
JPT: Están en el departamento de Recursos Humanos.
PD: ¿Las nuevas formas que utiliza el narcotráfico, dificulta las operaciones de una Policía como la hondureña?
JPT: El policía sabe que el crimen está mutando constantemente sus operaciones.
Pongo como ejemplo las extorsiones, cuando cerramos espacios en el rubro del transporte, los malvivientes se pasan a los centros comerciales, cuando llegamos a los centros comerciales se mueven a las carreteras. Lo más importante para la Policía es manejar la información, hacia donde se orienta el delito.
Para el caso, con la presión que ejerce Fuerzas Armadas en la zona de La Mosquitia, el asunto de la droga se ha trasladado hacia el Pacífico, prueba de ello es que en el sur hay más actividades del narcotráfico y esperábamos que eso fuera a pasar.
Mientras haya países que produzcan drogas y otros que lo consuman, además que existan zonas donde obligatoriamente tenga que pasar este producto prohibido, el problema está planteado, el tema es cómo controlamos nosotros ese tránsito.
PD: Luego del reciente anuncio de 21 congresistas estadounidenses que piden retirar la ayuda a Honduras ante las violaciones a derechos humanos protagonizadas por cuerpos de seguridad del Estado, ¿cómo está la cooperación externa?
JPT: Tenemos bastante ayuda externa, pero le apostamos a nuestros propios recursos. Tenemos que ser autosostenibles porque Colombia nos puede ayudar, pero por cuánto tiempo nos va a ayudar, Estados Unidos igual.
Queremos tener nuestra propia estrategia y la política está orientada a crear capacidades propias de la Policía Nacional que puedan ser sustentables y sostenibles en el tiempo con los recursos nacionales.
No tenemos que estar dependiendo de la ayuda externa porque si en determinado momento no se nos sigue dando esa ayuda los sistemas se nos vienen abajo.
PD: ¿Cómo quedó la Fuerza Maya-Chortí que comparten Honduras y Guatemala, tomando en cuenta la crisis política que atraviesa el vecino país?
JPT: Lo de Guatemala es un problema político que tiene el presidente Otto Pérez. Las operaciones de seguridad conjunta con las autoridades guatemaltecas siguen trabajando normalmente, no hay ningún obstáculo en eso.
PD: Hace dos semanas hablamos con autoridades militares desplegadas en La Mosquitia y nos apuntaban la importancia de declarar un desarme general en la zona ¿qué opina?
JPT: Esa es una decisión política. Habría que analizarlo, plantearlo al soberano Congreso para que emitan una resolución o un decreto como lo hicieron para la zona de Colón.
PD: Reconocemos que el trasiego de drogas por Honduras ha disminuido, pero se incrementa el consumo interno, ¿qué estrategias prevé la Policía?
JPT: No es que haya aumentado, lo que pasa es que hasta ahora nos estamos dando cuenta de los niveles de consumo de drogas que existían en el país.
Lo que pasa es que ahora tenemos más controles, hay más información, más datos estadísticos, más capturas y como autoridad estamos reprimiendo más estas actividades ilícitas.
Lo importante es que identificamos el problema y lo estamos atacando, lo estamos combatiendo y eso no le permite al gobierno focalizar los esfuerzos.
PD: ¿Le satisface el hecho que Honduras hace unos años era la narcobodega de la región y ahora ese fenómeno se ha trasladado a países vecinos?
JPT: Claro que sí. Eso nos permite tener un poco más de orden en el país y ver realmente que es lo que está pasando para ejercer mayor control.
Lo ideal es que esto desapareciera, si este fenómeno se ha trasladado a otros países del área, en cualquier momento si nos descuidamos nos regresa otra vez el problema.
Estamos en alerta permanente y eso tiene un costo para el país.
PD: ¿Usted ordenó retirarle la seguridad al exdirector policial Ramón Sabillón Pineda?
JPT: No sé qué le pasa al general Sabillón. Él tenía asignada un número determinado de agentes de seguridad, se hizo una revisión de todos los exdirectores y exfuncionarios que tienen seguridad del Estado ya que hay 400 policías en estas labores personales.
Lo anterior nos limita enormemente el tener capacidad de despliegue en las calles.
Tenemos un problema de déficit de 40 policías en Choloma y Puerto Cortés. Lo que tratamos fue buscar de donde sacar esos agentes que nos faltaban.
Lo que se hizo fue reducir al 50 por ciento la seguridad del exdirector Sabillón, es decir él tiene asignados 10 policías para su seguridad personal.
PD: El mismo exdirector Sabillón habla de 20 órdenes de aprehensión contra extraditables que no se ejecutan por la Secretaría de Seguridad, ¿qué pasa con esas capturas?
JPT: No sé de dónde saca ese dato, desconozco si él tenía conocimiento de esas 20 órdenes de captura que habla, aquí no tengo esa cantidad, al menos la Policía no las tiene, tal vez las tenga otra agencia que él conoce.
Puede ser que haya 20 personas que tengan petición de extradición, pero una cosa es que un gobierno solicite en extradición a hondureño y otra muy distinta es que exista la orden de captura porque la petición lleva un proceso.
PD: ¿Cuántos tiene en su escritorio?
JPT: Cuatro de ciudadanos hondureños y creemos que están en el país.
PD: Sobre los expedientes por enriquecimiento ilícito de altos oficiales que ha presentado la DIECP, ¿qué seguimiento le dan ustedes a eso?
JPT: Ese es un proceso que lo está llevando Fiscalía y el Tribunal Superior de Cuentas, eso ya data de varios años.
La Secretaría de Seguridad ha hecho lo que le ha correspondido que es presentar la documentación que estos organismos han requerido, lo que existe se ha hecho, luego las decisiones si existe o no requerimientos fiscales ya son otro tipo de diligencias que no nos corresponden.
PD: ¿Con qué perfil de la Policía quiere dejar cuando se vaya de la Secretaría de Seguridad?
JPT: Quiero irme con la satisfacción de haber recuperado una institución tan importante para el Estado de Honduras como la Policía Nacional.
Queremos dejar una institución confiable, profesional y fortalecida.
PD: ¿Ha vivido celos por ser militar de carrera y dirigir un cuerpo policial?
JPT: En algunos casos, pero no la gran mayoría. He tenido una buena recepción de los policías, les he demostrado que vengo a trabajar por ellos y cumplir la orden del señor Presidente (Juan Orlando Hernández) que declaró el 2015 como el año de Fortalecimiento de la Policía Nacional.