Tegucigalpa – María Auxiliadora Sierra, asistente de la Fiscalía de Delitos Comunes del Ministerio Público y esposa del asesinado ex fiscal Edwin Eguigure, señaló al joven universitario Kevin Solórzano como uno de los tres sicarios que cometieron el crimen el pasado 11 de noviembre en la aldea El Chimbo, periferia de Tegucigalpa.
– “Yo soy la víctima”, dijo con ira reflejada en su rostro, al tiempo que denunció que siente temor por su seguridad y la de sus hijos.
– Criticó que el bufete propiedad del actual fiscal adjunto, Rigoberto Cuéllar, sea el encargado de la defensa del joven Solórzano. “En ese momento me sentí desbastada y confundida porque no sabía a qué se estaba enfrentando”, dijo.
La actual funcionaria de la Fiscalía hondureña relató que los tres sicarios nunca se taparon el rostro para cometer el crimen contra su esposo; “la intención de ellos era acabar con la vida de todos nosotros, pero existen los milagros y no lo lograron”, afirmó.
“A los días Fusina y la Policía Militar capturan a uno de los tres sicarios, y es en ese momento que me doy cuenta que era el que apuntaba a mi cabeza… él vive cerca de mi casa, cerca del hogar de mis hijos, es así que lo dejan detenido y me presento a una audiencia, para mi sorpresa es ver a la defensa y ver que ambos abogados pertenecen al bufete Cuéllar-Gálvez-Cerrato-López y asociados, del cual es socio uno de mis superiores”, detalló.
Prosiguió que en ese momento se sintió desbastada y confundida porque no sabía a qué se estaba enfrentando. “Ya que un bufete de prestigio, oneroso y poderoso representaba a alguien que supuestamente no tiene la capacidad económica para pagar dicha firma”, dijo.
Contó que en la audiencia conoció al sicario que le arrebató la vida a su esposo. “Ese rostro -se refiere a Kevin Solórzano- nunca lo olvidaré”.
Las declaraciones de Sierra fueron vertidas por medio de un video que hizo llegar a los medios de comunicación. Ella y sus hijos se encuentran fuera del país, informó un hermano de la fiscal.
Declaró que decidió romper el silencio por las aseveraciones que todos los días se hacen a través de los medios de comunicación y las redes sociales.
La viuda lamentó que a través de los medios de comunicación se ha creado una campaña para desacreditar las actuaciones realizadas por Fusina y Policía Militar, así como las investigaciones hechas por el Ministerio Público. “Me denigran a mí como persona por ser funcionaria pública, en este caso una fiscal auxiliar, por ser testigo del asesinato de mi esposo y también víctima de un atentado criminal”, indicó.
“Tengo temor de esas personas que están montando una campaña sucia en contra mía y de mi familia, tengo temor que vuelvan a hacerme daño… señores de los medios (comunicación) les pido que no se presten a victimizar a un sicario, que no engañen a un pueblo hondureño, que hasta esta fecha no han escuchado las dos historias de una verdad”, exteriorizó.
El pasado viernes la Corte de Apelaciones del Poder Judicial declaró “no ha lugar” la solicitud de la defensa de Kevin Solórzano para lograr un sobreseimiento provisional de su cliente. El imputado permanece recluido en la Penitenciaría Nacional de Támara, a la espera de la audiencia preliminar.