La víctima fue identificada como Claudia Flores de 33 años, una vendedora de medias femeninas en las inmediaciones del mercado Álvarez, que, según testigos, fue engullida por una alcantarilla que explotó producto de las intensas lluvias.
Un fuerte aluvión que, según la oficina local de Meteorología, es producto de los remanentes que dejó el huracán y tormenta tropical “Félix”, provocó un verdadero caos en la capital hondureña en unos pocos minutos.
La tormenta duró entre 40 y 50 minutos, y aunque no azotó a toda la ciudad, fue muy intensa, con un registro de 39,3 milímetros de lluvia, dijo una fuente del Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
La lluvia provocó leves inundaciones, deslizamientos y derrumbes de tierra en una veintena de sectores residenciales de riesgo, además de la caída de vallas publicitarias en algunas calles, según los bomberos y otros cuerpos de socorro.
Al menos cuatro personas resultaron lesionadas y 27 viviendas dañadas parcialmente en esos sectores, según Cordero.
Las precipitaciones estuvieron acompañadas de una fuerte actividad eléctrica y causaron apagones en más de una veintena de colonias de la ciudad, así como inundaciones en la zona de los mercados y el desbordamiento de la quebrada “El Sapo”.
También se reportaron algunos derrumbes en las colonias Villa Unión en el norte de la ciudad y en El Pedregal en la zona sur e inundaciones en la colonia 3 de Mayo y en la séptima y cuarta avenida de Comayaguela.
La situación provocó un caos vehicular en la zona de los mercados y en el centro de la capital, por lo que las autoridades de la Alcaldía y la Dirección de Tránsito se vieron obligados a cerrar algunas avenidas.
Cuadrillas del Cuerpo de Bomberos y de la municipalidad de Tegucigalpa fueron desplazadas a las áreas afectadas para ayudar a las personas afectadas.
El comandante del Cuerpo de Bomberos, Carlos Cordero, indicó que se está por confirmar la desaparición de un menor que supuestamente fue arrastrado por las aguas en las cercanías del mercado Álvarez.
Cordero indicó que también fueron rescatados varios niños que habían quedado atrapados en una escuela al sur de la ciudad, y también dos personas que habían quedado atrapadas en su vehículo, luego que un árbol les cayera encima.
El alcalde Ricardo Álvarez se desplazó a las áreas afectadas para constatar la magnitud de los detalles y prestar apoyo a las personas afectadas.
Álvarez lamentó que la ciudad sea tan vulnerable a este tipo de fenómenos, ya que con apenas unos minutos de lluvia se convierte en un caos.
Cordero recomendó a las autoridades municipales declarar el estado de alerta amarilla, mientras se mantenga la influencia dejada por el huracán Félix y para evitar que las lluvias los agarren desprevenidos.
