Ciudad de México– Las Fuerzas Armadas y de Seguridad Ciudadana de México trasladaron este lunes al narcotraficante Rafael Caro Quintero, fundador del Cartel de Guadalajara, al hospital Adolfo López Mateos, en Toluca, Estado de México, para realizarle una cirugía «programada».
Luego de un procedimiento «ambulatorio» del que no dieron detalles, las autoridades reportaron el regreso de Caro Quintero al reclusorio Cefereso número 1, conocido como penal El Altiplano, donde está recluido desde 2022 y purga una sentencia de 40 años.
«Al término de la cirugía, los médicos tratantes determinaron que no requería permanecer más tiempo en el nosocomio, por lo que, con las medidas de seguridad que el caso amerita, la persona privada de su libertad Rafel ‘N’ fue trasladada al Cefereso No. 1, sin reportar alguna novedad», indicó la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) en un comunicado.
Medios locales reportaron que, de acuerdo con una fuente del hospital, Caro Quintero fue sometido a una operación de la próstata.
El operativo fue implementado por la SSPC, en conjunto con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Guardia Nacional.
El traslado aéreo con apoyo terrestre implicó un operativo en el que participaron 61 integrantes de las Fuerzas Armadas y de seguridad.
«Durante el traslado realizado para salvaguardar la seguridad de la ciudadanía y los asistentes al hospital, no se reportó incidente alguno», señaló la dependencia.
«A su regreso al centro penitenciario, a la persona privada de la libertad, se la dará seguimiento a su condición de salud, en apego y respeto a los Derechos Humanos», agregó.
El arresto de Caro Quintero ocurrió el 15 de julio de 2022 en el noroeste del país con fines de extradición a Estados Unidos, donde la Agencia Antidrogas (DEA, en inglés) lo consideraba entonces el capo más buscado.
Pero la extradición se ha retrasado porque Caro Quintero, fundador del Cartel de Guadalajara, ha obtenido amparos para suspender de forma indefinida su traslado a Estados Unidos, donde está acusado del secuestro, tortura y asesinato en 1985 de Enrique ‘Kiki’ Camarena, agente especial de la DEA. EFE/ir