San Salvador – El atraso, las discrepancias de los partidos con el Tribunal Supremo Electoral (TSE) y el cambio de reglas han marcado el escrutinio final de las elecciones legislativas y municipales en El Salvador.
El TSE modificó el instructivo que rige el escrutinio para que todos los partidos tengan representación en las mesas en las que se realiza el recuento de votos a raíz de los señalamientos de falta de transparencia, principalmente del oficialista Nuevas Ideas (NI).
«Ya nos retrasamos demasiado», dijo a la prensa el magistrado del TSE Guillermo Wellman e indicó que espera que el sábado concluya el escrutinio de los resultados de las votaciones de la Asamblea Legislativa y el lunes oficializar los resultados.
Además de los votos para el Congreso, se deben escrutar los resultados de las elecciones de los 262 consejos municipales y 20 representantes para el Parlamento Centroamericano (Parlacen).
El magistrado Noel Orellana sostuvo que todas las mesas avanzan en el escrutinio y que el TSE es el principal interesado en que «se resuelva a la brevedad posible», porque la población espera que se «oficialice la voluntad popular».
En el hotel en el que se realiza el escrutinio, que legalmente es el que deja en firme los resultados, se han presentado diversos funcionarios del Gobierno de Nayib Bukele, pero como representantes de NI.
La jefa del Gabinete de Gobierno, Carolina Recinos, aseguró a periodistas que «no existe la mínima posibilidad de que los resultados se modifiquen o que entremos a una confrontación innecesaria».
Miembros de las Juntas Electorales Departamentales (JED) denunciaron que el TSE decidió dejarlos fuera del escrutinio ante supuestas «presiones» del oficialismo.
Marcos Vanegas, de la JED del departamento de La Unión, dijo que «el Gobierno ha metido manos dentro de este escrutinio final».
Francisco Parada, integrante de la JED de San Salvador, señaló que su exclusión del escrutinio es «una situación muy irregular, muy complicada» y que «nos llena de preocupación».
De acuerdo con el Código Electoral, «los miembros de las Juntas Electorales Departamentales estarán obligados a presentarse al escrutinio final».
El secretario general del opositor Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), Óscar Ortiz, sostuvo que si no se normalizaba el escrutinio final este viernes, su partido lo abandonaría.
En los comicios del domingo pasado asistieron a las urnas más de 2,7 millones de salvadoreños, de los 5,3 millones convocados, y dieron al partido del presidente Bukele el control de la Asamblea Legislativa.
Según el escrutinio preliminar, NI llegaría a los 56 legisladores y alcanzaría la mayoría calificada, con lo que nos necesitaría de ninguna alianza para aprobar cualquier iniciativa del mandatario.
Es número de legisladores le permitiría a NI elegir a magistrados de la Corte Suprema y Corte de Cuentas, además de fiscal general y procurador de Derechos Humanos. EFE
