Tegucigalpa – El 2015 concluye con una reducción de muertes violentas en Honduras comparado al 2014, pero la baja se encuentra empañada por la conmoción causada por diversas muertes de impacto de figuras públicas, empresariales y hasta del sector deportivo, las cuales pusieron en alerta a la población de este país centroamericano.
Entre los casos que conmocionaron a la sociedad hondureña durante el 2015, figuran autoridades policiales y sus familiares, diputados, ex diputados, dueños de medios de comunicación, regidores, alcaldes y vice alcaldes, así como jugadores de fútbol y dirigentes deportivos.
El 18 de enero el comisario de policía Marco Aurelio Arias Rodríguez y su esposa Lorena de Arias, fueron asesinados a inmediaciones de la avenida Circunvalación, cerca de un centro comercial en San Pedro Sula, cuando se transportaban en un vehículo doble cabina.
Posteriormente el 22 de enero, el empresario y ex diputado nacionalista Juan Gómez Meléndez (64) fue asesinado al momento que salía de una institución bancaria ubicada en Tocoa, Colón.
Gómez Meléndez, también exgobernador de Colón, era un empresario de la zona, relacionado con la construcción de carreteras y puentes, además fue diputado suplente en el período 1990-1994.
Asimismo el 5 de febrero, uno de los tres presidentes del club Real España de San Pedro Sula, Mario Verdial Alcina, fue asesinado en el norte del país. En el ataque también perdieron la vida otras dos personas.
Verdial viajaba junto a su guardaespaldas cuando fue atacado a disparos en el sector de El Calán, Villanueva, departamento de Cortés.
El dirigente del fútbol salía de una finca avícola de su propiedad ubicada en la zona donde se produjo el ataque. Las otras dos víctimas son un guardaespaldas de Verdial y un conductor de mototaxi que pasaba por la zona.
Sumado a los anteriores, el 10 de marzo, el dirigente del transporte y empresario sampedrano Carlos Andonie (69) fue acribillado en la Avenida Circunvalación a inmediaciones del barrio Paz Barahona de San Pedro Sula.
El empresario murió tras recibir al menos una decena de balas en su cuerpo, quedando inerte a un costado de una de sus unidades de transporte.
Andonie representaba a un grupo del transporte en San Pedro Sula y fue presidente de la Asociación de Motoristas Profesionales de Honduras (Asomoproh) en los últimos 38 años.
En otro suceso de impacto, el ex magistrado de la Corte Suprema de Justicia (1990-1994), José Eduardo Gauggel Rivas, junto a su hijo el entonces diputado en el Congreso Nacional, José Eduardo de Jesús Gauggel Medina, fueron asesinados en el barrio Los Andes de San Pedro Sula.
Los dos dirigentes del Partido Liberal se transportaban en una camioneta blindada. El cuerpo del padre quedó en el interior de la vivienda, mientras su hijo yacía en el automotor.
Igualmente el 23 de abril, cuando realizaba sus labores en el pleno centro de la ciudad, sujetos ultimaron al jefe de la Policía Preventiva de Victoria, Yoro, Eliseo Bueso Reyes.
Del mismo modo, el 4 de julio, sujetos desconocidos asesinaron a Joel Aquiles Torres (48), dueño de un medio de comunicación cuando transitaba por la carretera CA-5 Norte a la altura de Taulabé, Comayagua, zona central de Honduras.
Torres, era el propietario de canal 67 y socio de un sistema de cable en esa localidad del país.
Ese mismo día, el regidor nacionalista del municipio de El Negrito, Yoro, norte de Honduras, José Saúl Tinoco, fue asesinado por sujetos desconocidos en su casa de campo en el barrio Las Palmas, localizado en ese municipio.
Según se indicó en ese momento, sujetos desconocidos llegaron hasta su vivienda y le dispararon en reiteradas ocasiones.
Además el 10 de agosto, engrosó la cifra de víctimas de la violencia, el vicealcalde de Chinda en el departamento de Santa Bárbara, Robinson Castillo Ríos, tras ser asesinado en esa zona noroccidental del país.
De acuerdo a datos recabados, el malogrado vicealcalde nacionalista y la jefa edilicia de ese término municipal, Ibeth Geraldina López, permanecían bajo amenazas a muerte luego que desconocidos quemaran la alcaldía, meses atrás.
Entre tanto, el 5 de septiembre y tras luchar por su vida en un centro asistencial luego de recibir un atentado, murió el empresario Samy Abufele.
La víctima, quien también era el dueño de la empresa de helados Frosty, Samy Abufele, salió herido en la balacera protagonizada por sujetos que le daban persecución.
Uno de los diversos o casos que se integraron a la lista de sucesos de impacto fue el ocurrido el 16 de septiembre, cuando Eduardo Montes Manzano, abogado defensor de la vicepresidenta del Congreso Nacional, Lena Gutiérrez en el caso Astropharma-Secretaría de Salud, fue asesinado a puñaladas en el ascensor de un centro comercial de la capital hondureña.
Tras lo ocurrido, el supuesto hechor, fue detenido por la seguridad del centro comercial y luego entregado a las autoridades del orden.
Montes representaba a la familia Gutiérrez en el caso Astropharma-Secretaría de Salud.
La policía capturo a Rigoberto Paredes Vélez como responsable del asesinato, ya que se declaro previamente responsable del mismo.
Posteriormente el 25 de septiembre, el abogado de la pareja José “Chepe” Handal y Edna Elizabeth Hernández Amaya, ambos acusados por el presunto delito de lavado de activos, fue asesinado en el interior de un lujoso vehículo en la colonia 21 de Octubre.
La víctima respondía al nombre de Ilich Villela, representó a la pareja Handal-Hernández en la audiencia inicial que se celebró el 26 de marzo del presente año.
También el pasado 4 de octubre, fue asesinado el alcalde de La Libertad, Francisco Morazán, Efin Rolando García Flores (49).
Es de señalar que García Flores, de filiación nacionalista, cumplía se tercer mandato edilicio y fue asesinado luego de departir en una fiesta de la localidad.
El cuerpo sin vida del jefe municipal fue encontrado en las riberas de un río de la comunidad de La Libertad. Estaba desnudo, presentaba varios impactos de bala, incluso un disparo le perforó la cavidad oral y tenía cuerdas amarradas al cuello.
También el nueve de octubre, el inspector de la Policía Nacional asignado a la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), Brayan Salomón Moreira, fue asesinado por supuestos pandilleros en un conflictivo sector de la ciudad de San Pedro Sula.
Moreira estaba asignado a la unidad de respuesta inmediata de la DPI de San Pedro Sula, y según la información que se maneja, el oficial andaba en una misión antidroga en ese conflictivo sector, cuando le salieron al paso varios jóvenes con armas de grueso calibre, obligándolo a salir del vehículo y lo condujeron hasta un solar baldío donde le dispararon hasta matarlo.
El 2 de diciembre, el alcalde del municipio de Dolores, departamento de Copán, Santiago Mejía Díaz (60), fue acribillado en esa zona occidental del país.
El malogrado edil era de filiación nacionalista y el mismo fue atacado en el desvío de Dulce Nombre, Copán, en el momento que viajaba junto a su esposa Carmen Ramos, quien resultó gravemente herida y tuvo que ser ingresada a un centro asistencial de la zona.
Estos hechos violentos y de impacto cerraron el año, conmocionando a la población con el asesinato del seleccionador de fútbol hondureño Arnold Peralta.
Peralta fue asesinado en el estacionamiento en un centro comercial de la ciudad de La Ceiba.
Al momento del suceso, el jugador del Olimpia y de la selección nacional, Arnold Fabián Peralta (26), era acompañado por dos jugadores del Vida.
Masacres
A las muertes de impacto también se sumaron masacres como la ocurrida en Choloma, donde perecieron ocho personas.
En menos de 24 horas del asesinato de ocho personas en Choloma. Siete personas fueron ultimadas en la colonia 19 de septiembre, cercanías de la colonia Los Laureles de Comayagüela, zona central de Honduras.
Según el reporte inicial el ataque habría sido perpetrado por pandilleros, quienes habrían sacado a las víctimas de sus viviendas para asesinarlos en el lugar también conocido como “El Infiernito”.
En otro hecho similar, siete personas murieron en una masacre ocurrida en Nueva Frontera, Copán.
