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Las ideas marcan el camino

Pedro Gómez Nieto

No importa que no se perciba o reconozca, son los intelectuales quienes establecen el rumbo de nuestras vidas. Artistas, escritores, científicos de cada rama del conocimiento colocan los rieles por donde transita la humanidad en vagones de pensamiento y comportamiento. Decía Einstein que las personas son seres mortales capaces de generar ideas inmortales.

En España, el XX Premio Casa de América de Poesía Americana, ha sido adjudicado a la obra «Los cisnes negros» escrita por Rolando Kattan, lo que nos enorgullece. El poeta galardonado es miembro de número de la Academia Hondureña de la Lengua y miembro correspondiente de la Real Academia Española de la Lengua. Sin embargo la figura de Kattan es reconocida y requerida en los medios por otro tipo de capacidades y responsabilidades, las que desarrolla como Comisionado del Registro Nacional de las Personas (RNP), actualmente empeñado en el enrolamiento y depuración del censo electoral, para entregar a la sociedad un nuevo documento de identidad.  

Denuncia el filósofo Thomas Sowell que mientras en otros tiempos el éxito de un compatriota era fuente de inspiración, hoy se ha convertido en fuente de agravio para los fracasados que no han logrado nada. El salvador Nasralla injuria a Kattan por su trabajo en el RNP; con menosprecio le llama “bachiller” marcando diferencias con su ingeniería civil cursada hace más de cuarenta años, desactualizada como toda formación que no se ejerce. Pero Kattan es ingeniero en sistemas, trabajó en la banca, es académico, exitoso escritor… ¿Entonces? Hace un año, el 23.09.2019, escribía en la columna: “Necesitando coherencia, recurre al autoengaño para reducir la presión emocional y justificar la bipolaridad. Un hipócrita es un disonante. Nasralla aprovecha los micrófonos para deslegitimar las nuevas estructuras electorales y a sus autoridades”.

Decía Fidel Castro que no existe fuerza en el mundo capaz de aplastar la fuerza de las ideas. No consta que el “ingeniero” haya publicado alguna tesis, informe o artículo con sus ideas sobre, por ejemplo, política exterior, medioambiente, agricultura, economía, educación, salud, fuerzas armadas, delincuencia organizada, Seguridad Nacional… Aunque sean solo apuntes, el “bachiller” Kattan puede servirle de amanuense, incluso facilitarle los editores de sus numerosas obras traducidas a diez idiomas.

El Papa Francisco publicó la encíclica «Laudato si’», recordando al mundo que todos estamos en la misma barca y dejando al descubierto nuestras falsas seguridades. Navegamos en la misma barca pero no en los mismos lugares, porque cada ADN es único. El problema no es el sitio que ocupemos, sino la disponibilidad de recursos e infraestructuras para mejorar nuestra posición según capacidad y esfuerzo. Esa responsabilidad corresponde a los respectivos gobiernos si quieren reducir la pobreza en lugar de seguir subsidiándola: la derecha por menosprecio y pereza, la izquierda por estrategia. Al calor de la encíclica papal el socialismo insiste: “El capitalismo ha fracasado, la Covid-19 lo confirma”. Falso,lo que confirma la pandemia es la maldad del ser humano al margen de ideologías. Sin riqueza no hay civilización posible, razonaba Tolstói.

En Latinoamérica, mientras la derecha focalizó la economía como motor del desarrollo y riqueza, desatendiendo la educación, la izquierda invirtió en la siembra de ideas y adoctrinamiento, como semillero de emociones y cohesión social. Quien controla la educación de un pueblo controla su pensamiento, y dominado el pensamiento se controla su movimiento. Por eso sigue vigente el discurso demagogo y populista para poblaciones sumidas en la pobreza material, intelectual y espiritual. Históricamente el socialismo fracasa allá donde gobierna porque controla las libertades individuales y la producción de bienes, desactivando el emprendimiento. Mientras el capitalismo desiguala al ser humano en la riqueza, el socialismo lo iguala en la pobreza.

“Latinoamérica no necesita un país que nos guie, necesita ideas que nos guíen”, denunciaba Fidel Castro a los Estados Unidos, apostando por las ideas. “Una revolución solo puede ser hija de la cultura y de las ideas”, le decía Fidel a Hugo Chávez en su toma de posesión el 2 de febrero de 1999 en Caracas. Con ideas fue como ambos líderes construyeron sus dictaduras disfrazadas de revolución popular. ¿Por qué las caravanas de centroamericanos se dirigen hacia Estados Unidos, cuna del odiado capitalismo neoliberal, y no hacia Venezuela, cuna de la democracia socialista y paraíso del bienestar chavista?Humm. Se les ve el plumero. “Lo lamentable de nuestra lengua es que cada vez conocemos menos las etimologías de las palabras”. -Rolando Kattan-

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