Por: Mario Martín
Tegucigalpa.- Hay obstáculos notables en el manejo de la información que – aunque se supone debe ser o pública o absolutamente privada y confidencial – sigue en manos ineficientes y, en el peor de los casos, se está apropiando y alterando para propósitos ilícitos.
Este tema nos interesa como ciudadanos y como profesionales dedicados a la inversión, al diseño, al desarrollo urbano y sus efectos económicos, sociales y de equidad.
Siendo vital para el desarrollo y siendo de responsabilidad casi siempre del Estado – excepto en los casos de propiedad de entes financieros – su garantía y salvaguarda y su registro ha estado en precario e incompleto por generaciones ˝manoseada˝ como decimos coloquialmente. Los valores de los activos, especialmente los casos de propiedad del Estado, se pierde por simple sub registro, ausencia de base de datos confiable o alteración intencional. Tal es el caso, del registro de bienes muebles como los vehículos, y de los inmuebles como los predios y terrenos en todo el país. Creemos que es asunto de visión y de gestión efectiva y de interés de los financieros, los alcaldes y las autoridades del Ejecutivo, actuar sobre este tema.
Reconocemos que, a nivel nacional, el fortalecimiento del Instituto de la Propiedad, según decretos ejecutivos de los últimos años, apunta directamente a resolver este problema. Queremos hacer notar que por fuentes internacionales y como un avance en tecnología informática mundial, se abre la oportunidad para países en desarrollo como el nuestro, de romper viejos paradigmas y resolver obstáculos hasta ahora incólumes. Esto ha quedado oficializado en documentado de reuniones recientes de las Naciones Unidas.
Programas, tales como Blockchain, e instituciones innovadoras como Benben en Ghana África, Bitfury en Georgia ex Unión Soviética y, para nuestra sorpresa, Factom en Honduras – todas iniciativas privadas – han logrado penetrar el misterio y ofrecen soluciones seguras permitiendo fácil acceso legal al registro de la propiedad. También nos sorprende que, en nuestro caso, aunque las fuentes privadas internacionales informan de arreglos ya hechos con las autoridades, se reporta que el esfuerzo de mejorar el sistema se ha estancado debido a ¨bloqueos políticos¨. Es de interés saber cuáles son estos bloqueos.
Citamos a continuación, de los considerandos del decreto de 2013 sobre el nuevo Instituto de la Propiedad que busca modernizar el sistema de registro de derechos y mejorar el sistema¨…para alcanzar niveles de desarrollo que generen progreso económico y bienestar para toda la población.¨
¨Los registros públicos juegan un papel fundamental en los procesos de simplificación administrativa, en el fortalecimiento de los mecanismos de generación de información pública, segura y confiable, y para mejorar las condiciones de inversión y competitividad del país, por lo que se requiere que sean administrados de manera eficiente, dinámica y confiable.¨
Así, la ley fue concebida¨con la finalidad de contar con un sistema de la propiedad incluyente mediante el establecimiento de procesos de administración de regularización de la misma y la modernización de los sistemas de registro de derechos, con el objetivo de incrementar la seguridad jurídica permitiendo al país alcanzar niveles de desarrollo que generen progreso económico y bienestar para toda la población.¨
Creemos que todas estas son buenas noticias y parecen conducir a instrumentos más eficaces para salvar los obstáculos que además han limitado la participación dinámica del sector privado, los bancos y las entidades de base que hacen crecer el capital social y la mayor participación en el desarrollo. Conviene que los funcionarios actuales y los que será electos o nombrados en el nuevo gobierno, aprovechen estas aperturas para seguir impulsando el crecimiento y la justa distribución de los beneficios derivados del factor tierra y los recursos naturales del país, así como de la inevitable plusvalía inherente al crecimiento urbano.
Sostenemos que, aunque el tema no es del contenido tradicional de la formación profesional y de los planes de estudio universitarios, es tiempo que hagamos un esfuerzo por conocerlo y por poner en práctica los medios para canalizarlo hacia el crecimiento económico y social.Se invitan comentarios a: marioemartin69@gmail.com
