Recife (Brasil) – Las autoridades brasileñas se incautaron de 650 kilos de cocaína en el estado de Pernambuco, en el nordeste del país, que tenían como destino final Europa, informaron este jueves fuentes policiales.
Durante el operativo, realizado de manera conjunta por la Policía Federal y la Policía Militarizada de Pernambuco, fueron arrestadas nueve personas en el aeródromo de Igarassú, en la región metropolitana de Recife, la capital regional.
Durante la acción policial se confiscaron, además del pequeño avión en el que se transportaba la droga, ocho automóviles, una pistola, doce teléfonos móviles y «una gran cantidad» de documentos que fueron usados para el transporte de la droga.
Según explicó la Policía Federal en un comunicado, el piloto ya era investigado por probables nexos con el narcotráfico, delito por el que ya había estado preso antes.
Asimismo, se «identificaron inconsistencias» en el plan de vuelo de la aeronave, que realizó varios «aterrizajes irregulares», lo que alertó a las autoridades.
De acuerdo con las investigaciones, el pequeño avión salió de una localidad en el estado de Goiás (centro-oeste) y tenía una escala en Ararapina, en Pernambuco, antes de aterrizar en Recife.
Sin embargo, la aeronave no terminó su viaje en la capital regional, como estaba previsto en su plan de vuelo, sino unos 27 kilómetros antes, en el vecino municipio de Igarassú, lo que levantó las sospechas por parte de las autoridades.
La droga «probablemente embarcaría en contenedores de barco y seguiría para África, para después ser distribuida en Europa», apuntó la Policía en la nota.
Los detenidos en la operación, entre ellos una mujer, el piloto y el propietario de la avioneta, responderán ante la Justicia por los delitos de tráfico internacional de drogas y posesión ilegal de armas.
