Tegucigalpa – La capital hondureña “estalló” esta medianoche para despedir un complejo año viejo y dar paso a un esperanzador 2025.
Cuando el reloj marcó las 12.00 de la noche el cielo se iluminó con multicolores shows de juegos pirotécnicos mientras poco a poco una capa de humo se apoderó de las gemelas Tegucigalpa y Comayagüela.
Como ocurre todos los años, pese a la prohibición edilicia para reventar pólvora en el Distrito Central, en los barrios y colonias el denominador común fueron los estruendos provocados por cohetes de todo calibre.
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La quema de monigotes no faltó en las celebraciones de fin de año de los capitalinos, siendo los personajes políticos hondureños los preferidos que reventaron y quemaron lo difícil que dejó el 2024.
Por espacio de media hora la capital hondureña “tronó” al tenor de los productos elaborados a base de pólvora, al tiempo que en los hogares se confundían los buenos deseos a través de abrazos y plegarias para un mejor año. JS
