Guatemala.- La exvicepresidenta de Guatemala Roxana Baldetti, acusada de liderar la red de corrupción aduanera conocida como «La Línea», ingresó hoy en el hospital público San Juan de Dios para una evaluación médica.
Baldetti, quien guarda prisión preventiva en el centro penitenciario de Santa Teresa, llegó esta tarde al centro hospitalario, ubicado en la zona 1 capitalina, tal y como mostraron imágenes reproducidas por los medios locales.
La exvicepresidenta aparecía acompañada por sus abogados, tres médicos y varios agentes del Sistema Penitenciario, mientras estaba sentada en una camilla.
Baldetti estuvo ingresada desde el pasado 13 de septiembre hasta el 15 de octubre en el Centro Médico Militar, donde recibía tratamiento intravenoso por poseer una bacteria sanguínea conocida como «clostridium difficile».
El Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala (Inacif) realizó varias evaluaciones de salud a Baldetti desde su captura, el pasado 21 de agosto, acusada de pertenecer a una millonaria estructura de corrupción en el ente recaudador de impuestos bautizada como «La Línea».
La comunicadora, de 53 años, fue apresada en agosto y enviada a la prisión del cuartel militar Matamoros, aunque el juez que lleva su caso, Miguel Ángel Gálvez, ordenó su posterior traslado el 3 de septiembre a la cárcel de Santa Teresa junto a otros reos comunes.
La exvicepresidenta, quien renunció al alto cargo el 8 de mayo pasado, está acusada de los delitos de cohecho pasivo, caso especial de defraudación aduanera y asociación ilícita.
Por el mismo escándalo de «La Línea» se encuentra encarcelado desde el 3 de septiembre el expresidente Otto Pérez Molina, quien renunció a su cargo ese mismo día después de tres años y medio en el poder.
Por su parte, el director del Hospital San Juan de Dios, Julio Figueroa, confirmó a medios locales el ingreso de Baldetti y dijo que se debe a la última evaluación médica realizada por el Inacif.
Asimismo, el ministro de Salud, Mariano Rayo, defendió este ingreso y proclamó: «No le vamos a negar asistencia a nadie. Se le atenderá (a Baldetti) como a cualquier persona que llegue».
Apenas una hora y media después de su ingreso, Baldetti salió del centro hospitalario en un vehículo custodiado por al menos 4 patrullas policiales.
Según declaraciones de Rayo al rotativo local Prensa Libre, en el primer informe se puedo establecer que la exvicepresidenta presenta un cuadro febril «secundario a un proceso infeccioso a determinar mediante exámenes de laboratorio», aunque su estado no requiere de un ingreso.
A su salida, en unas breves declaraciones a los medios locales, Baldetti dijo que un médico le dijo que su vida corría peligro y que hace 17 días que solicitó su traslado a un centro asistencial, debido a que no se encontraba bien.
Indicó además que necesita estudios de gastroenterología y de corazón, y que en este centro público, uno de los más grandes del país, se carece de este tipo de especialistas, motivo por el que no fue ingresada.
