Empleos del futuro: entre la automatización y la sostenibilidad

Gabriel Levy

El mercado laboral global está en un punto de inflexión. Mientras que la automatización y la inteligencia artificial redibujan los contornos de lo posible, la urgencia por la sostenibilidad ambiental plantea nuevos retos y oportunidades. Los empleos que hoy parecen seguros pueden no existir mañana, y aquellos que aún no hemos imaginado podrían volverse indispensables.

¿Qué habilidades y competencias serán necesarias en este futuro incierto? Y más importante aún, ¿qué empleos desaparecerán y cuáles emergerán?

La evolución del trabajo en la era digital

Cada año en este espacio del Tanque de Pensamiento de Andinalink, analizamos los cambios que se están produciendo en el mercado laboral y el rol del profesional del futuro.  Este año un análisis recientemente publicado del Foro Económico Mundial, nos dio muchos elementos nuevos para este ejercicio de reflexión.

El mercado laboral se encuentra en una encrucijada, impulsada por dos fuerzas principales: la revolución tecnológica y la transición hacia una economía verde.

La automatización y la inteligencia artificial, campos en constante expansión, están reconfigurando la forma en que trabajamos.

Según Klaus Schwab, fundador del Foro Económico Mundial, estamos al borde de una «Cuarta Revolución Industrial», un término que define como un cambio fundamental en la manera en que vivimos, trabajamos y nos relacionamos, impulsado por la convergencia de tecnologías digitales, físicas y biológicas.

La digitalización, impulsada por el Big Data, la computación en la nube y la inteligencia artificial, no solo está transformando los procesos empresariales, sino también creando nuevos campos de trabajo. Por ejemplo, el «prompt engineering» o ingeniería de instrucciones es una profesión emergente que se centra en optimizar la interacción entre humanos y modelos de inteligencia artificial.

Este rol subraya la importancia de la adaptabilidad y el aprendizaje continuo en un entorno laboral que cambia rápidamente.

 La transición hacia una economía verde

Simultáneamente, el cambio hacia una economía más verde está abriendo nuevos horizontes laborales. Según el Informe sobre el Futuro del Empleo 2023 del Foro Económico Mundial, la transición verde podría generar 30 millones de empleos en sectores como la energía limpia y las tecnologías de bajas emisiones para el año 2030.

Este crecimiento es impulsado no solo por la necesidad de reducir las emisiones de carbono, sino también por un reconocimiento cada vez mayor de la necesidad de prácticas sostenibles en todos los sectores económicos.

Desde la ingeniería ambiental hasta la consultoría en sostenibilidad, pasando por el diseño de ciudades inteligentes y la implementación de energías renovables, los empleos «verdes» están en auge. Los países líderes en esta transición, como Japón y varias naciones europeas, ya están experimentando un aumento en la demanda de profesionales capacitados en estas áreas. China, por su parte, también avanza rápidamente, mostrando que la sostenibilidad es una preocupación global que está remodelando la economía mundial.

 Nuevas habilidades para nuevos tiempos

El ritmo acelerado de cambio en el mercado laboral plantea una pregunta crucial: ¿qué habilidades serán esenciales para prosperar en el futuro?

El pensamiento analítico y la alfabetización técnica son dos de las competencias más valoradas en este nuevo panorama. La capacidad de comprender y aplicar conocimientos en STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) será fundamental, pero no todos necesitan convertirse en programadores.

Según Yuval Noah Harari, historiador y autor de «Sapiens», «la habilidad más importante en el siglo XXI será la capacidad de aprender constantemente cosas nuevas».

Además, habilidades como la comunicación efectiva y la empatía se volverán cada vez más importantes. En un mundo donde la inteligencia artificial puede replicar muchas funciones humanas, las habilidades sociales y emocionales serán diferenciadores clave.

Como destaca Dan Negroni, experto en talento y compromiso en el lugar de trabajo, «en una era de conectividad digital y trabajo remoto, la capacidad de conectarse genuinamente con otros será invaluable».

 Profesiones en transformación

El impacto de estos cambios no se limita a la creación de nuevos empleos, sino también a la transformación de los existentes.

La medicina, por ejemplo, sigue siendo una de las profesiones más demandadas, pero también está experimentando una evolución significativa.

Los profesionales de la salud no solo deben estar al tanto de los avances en tratamientos y diagnósticos, sino también integrar la inteligencia artificial en su práctica.

Los médicos que pueden combinar el conocimiento tradicional con nuevas tecnologías tendrán una ventaja significativa.

Por otro lado, profesiones más tradicionales como el trabajo manual siguen siendo necesarias. Sin embargo, estos roles también requieren una actualización de habilidades para integrar herramientas inteligentes y tecnologías emergentes.

En la agricultura, por ejemplo, la demanda no es solo para agricultores tradicionales, sino para ingenieros y técnicos capaces de aplicar innovaciones como la agricultura de precisión y la gestión inteligente del agua.

 El ocaso de ciertos empleos

No todas las profesiones tendrán cabida en el futuro. Con la creciente automatización, trabajos repetitivos como la atención al cliente, la gestión de oficinas y la contabilidad están en riesgo de desaparecer.

Los avances en inteligencia artificial y robótica han permitido que las máquinas realicen tareas con una eficiencia que los humanos simplemente no pueden igualar.

Sin embargo, esta desaparición de roles puede ser una oportunidad para que los trabajadores adquieran nuevas habilidades y se adapten a las demandas cambiantes del mercado laboral.

El valor de la creatividad humana

A pesar de la automatización y la digitalización, hay un área donde la inteligencia artificial aún no ha podido reemplazar a los humanos: la creatividad. Como señaló el filósofo y sociólogo Richard Sennett en su libro «El artesano», el deseo de crear algo único y significativo es una parte esencial de la condición humana.

Desde la escritura y el arte hasta el diseño y la narración de historias, las profesiones creativas seguirán siendo relevantes. En un mundo cada vez más dominado por máquinas, la creatividad y la capacidad de contar historias que resuenen con la experiencia humana se volverán aún más valiosas.

En conclusión, El mercado laboral está en constante evolución, impulsado por la innovación tecnológica y la necesidad de sostenibilidad. Aunque algunos empleos desaparecerán, muchos otros surgirán, requiriendo nuevas habilidades y competencias. Para prosperar en este entorno cambiante, la adaptabilidad, el aprendizaje continuo y la combinación de habilidades técnicas y sociales serán clave. En última instancia, mientras avanzamos hacia el futuro, la capacidad de los humanos para innovar, empatizar y crear seguirá siendo insustituible.

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